No hay nadie como el Real Ávila en esta Segunda RFEF. Al menos a domicilio, porque los encarnados se han convertido en un invitado de lujo allí donde van. Tres victorias en tres partidos, nueve puntos de nueve posibles. Se estrenaron en Abegondo ante el RCDeportivo Fabril, siguieron por Miramar ante el Marino de Luanco y continuaron en El Astillero, donde se imponían a un invicto Rayo Cantabria en un partido en el que los chicos de Miguel de la Fuente fueron contundentes allí donde se deciden los encuentros, en las áreas, y confirmaron lo es una realidad asumida por todos, «fuera de casa nos sentimos más cómodos». Dicho y hecho.
No es casualidad las palabras que pronunciaba Miguel de la Fuente antes del partido ante el filial racinguista. Jugar como locales en el Adolfo Suárez es un lujo. «Es jugar con un jugador más» siempre ha dicho el técnico encarnado cuando se ha referido al empuje de la afición cuando llegan los momentos claves del partido. Inclusive aquellos que ya han pasado por el césped encarnado lo han reconocido, como lo apuntaba Pablo Acebal cuando su Langreo aguantó a duras penas el tipo (0-0) ante el asedio de los locales y el empuje de la grada. Sin embargo el Adolfo Suárez tiene sus obligaciones, empezando por la de llevar la iniciativa de los partidos. Saben proponer los encarnados, tiene pie y jugadores para ellos, pero su juego es más de ritmo y pulsaciones altas que de cabeza y templanza. Se vio ante el UM Escobedo.Una situación que no ocurre fuera de casa, donde su papel como visitante les obliga a otras cosas. «Nos sentimos cómodos cuando vamos fuera, cuando no tenemos que llevar tanto la iniciativa» confesaba Miguel de la Fuente. Porque cuando eres el invitado el que debe proponer es el anfitrión. Y en ese papel es donde mejor funciona la idea, estilo y trabajo de los encarnados, debutantes en una categoría en la que se están desenvolviendo como veteranos. No es fácil sumar fuera de casa, mucho menos hacerlo de esta manera. Que empiece a decirse eso de 'cuidado, que viene el Real Ávila' va a convertirse en una realidad entre sus rivales.
No sólo son sensaciones, son números, que aunque fríos e interpretables en ocasiones, tienen mucho de verdad, y la primera de todas es que el Real Ávila es el mejor equipo a domicilio de toda la Segunda RFEF. Nadie iguala sus estadísticas, empezando por el propio Grupo 1, donde son el mejor equipo visitante con tres victorias en tres salidas, 9 puntos, 4 goles a favor y ninguno en contra. Ahora mismo la media de goles encajados a domicilio está en 2,9.
Bien es cierto que en el Grupo 2 no conocen la derrota como visitantes el Logroñés, Tudélano y Eibar B, líder del grupo, pero únicamente han tenido dos salidas hasta la fecha. Quizás alguno iguale los registros de los encarnados este fin de semana, pero está por ver. Es líder en el Grupo 3 el CE Sabadell FC y lo hace gracias a la vitola de ser el mejor visitante en su grupo, pero no de la categoría. Suma siete puntos de nueve posibles. Seis de seis suma el Xerez CD, líder del Grupo 4 junto al Linares Deportivo. Es el líder en el Grupo 5 el Getafe B, el mejor visitante entre los suyos. Lo hace con siete de nueve en su casillero.