No son tiempos fáciles para los crédulos. Tampoco sería para rasgarse las vestiduras. No son tiempos fáciles para comer, por lo de los alimentos procesados, ni para las coronarias, por los estreses. Pero la buena información es un artículo de lujo ahora, con la posverdad y las redes sociales, los memes de guasap y los excesos declaratorios. Por eso se agradece considerar a los profesionales de las agencias de noticias, portadores de información en estado purísimo. La quintaesencia de la democracia: conocidos los hechos, los ciudadanos se forjan opiniones de calidad siempre que estén fundadas sobre certezas.
Si a ello añadimos la orientación social y de progreso que acarrea la concepción del hecho regional, entendiendo como tal un compromiso entre cercanos para entendernos mejor y considerarnos más, es de justicia hacernos eco aqui del redondo aniversario de la Agencia Ical. Luismi Torres y los suyos, herederos de aquel esfuerzo primero de editores para producir las llamadas «páginas comunes» de noticias de Castilla y León.Es la actual agencia de noticias Ical peina a diario la Comunidad para ofrecer textos, imágenes fijas y en movimiento y sonidos que atestiguan cómo estamos haciendo las cosas por aquí.
Entrega Ical sus premios a personas seleccionadas con ánimo prospectivo, otra de las misiones de las agencias, hurgar en las periferias para que diversifiquemos nuestras obsesiones de actualidad. Esa condición fedataria pero asimismo vanguardista. Los periodistas de las agencias ( y en nuestra región están también las excelentes EFE y Europa Press) son los últimos en salir de la sala: siempre miran bien por si se les ha olvidado algún paraguas porque las prisas no dan más que motivo de equivocación.
Ha pasado el tiempo pero vamos a aprovechar esta efeméride para recuperar las reivindicaciones de hace 35 años: que las noticias de Castilla y León fluyan y peleen el interés diario entre tanta globalización y tanta instantaneidad. Quienes tuvieron un sueño pueden seguir apostando por él.