Se sacó el triunfo adelante, se sumó la primera victoria de la temporada. Era la primera premisa para el Hereda Ávila Auténtica El Bulevar en una Liga EBA -Grupo AB con apenas dos jornadas disputadas pero que pisaba por primera vez este curso el CUM Carlos Sastre, un parqué donde los verderones deberán sumar todo lo que puedan. Fuera es terreno hostil, mucho más cuando tus rivales aguardan a medio millar de kilómetros y en horas intempestivas. Este sábado los de Carlos Osvaldo Gómez volverán a meterse en el autobús para hacerse 1.000 kilómetros –514 de ida y otros tantos de vuelta– para jugar a las 20,15 horas ante A Estrada. De inicio, los gallegos ya parten con ventaja. Será la tónica toda la temporada, como lo será el tener que hacer del pabellón abulense un particular fortín donde sumar todo lo posible.
Se cumplió el primer objetivo. «Era importante sacar el primer partido en casa» marcaba de inicio Carlos Osvaldo Gómez tras el 60-56 a favor de los verderones. A partir de ahí, todo lo demás. Porque el duelo ante el Círculo Gijón Basket fue discreto. No acabó contento el técnico argentino. Era evidente que lo visto sobre el parqué –no ayudaron las 51 faltas decretadas por los colegiados– no fue de lo más vistoso. «En defensa lo hacemos bien.Estamos dejando en 50 puntos a nuestros rivales pero no podemos jugar a 60 puntos en ataque. Tenemos que estar más acertados, más concentrados, más fluidos». Estuvo acertado el equipo desde la línea de tiros libres, desde donde Alejo Maggi confirmó el triunfo a 9'' del final, pero no en lo demás. Apenas 17 de 68 en tiros de campo. Fueron 7 de 28 en triples, pero en los tiros de dos apenas 10 de 40. Por suerte no estuvieron mucho más acertados los gijoneses, para los que la enorme actuación de Martínez Fernández –20 puntos, 11 rebotes– no fue suficiente.
«El equipo ha estado muy apresurado en la circulacón de balón. Nos ha faltado trabajar más la jugada.Aún así, estamos trabajando demasiado los tiros. Deberíamos tener la soltura de romper en el uno contra uno, atacar de forma más libre, sorprender al rival. Los chicos están jugando a un sistema y no jugando al baloncesto, cuando lo que debemos hacer es jugar al baloncesto.De momento los chicos se sienten más seguros jugando así pero no podemos ganar partidos a 60 puntos, es la realidad».