Una iniciativa que lleva a cabo la periodista vasca Naiara Serrano, consistente en realizar un programa de radio protagonizado por niños que se encuentran hospitalizados en el Hospital de Cruces de Bilbao para así hacerles más llevadera su estancia en el centro y al mismo tiempo mostrarles cómo es el trabajo en ese medio de comunicación, se ha alzado con la VII edición del Premio de Periodismo en Positivo que convoca la Asociación de Periodistas de Ávila, en colaboración con la planta de Nissan en Ávila.
'Radio Tirita', que así se llema este programa de radio que Naiara Serrano lleva a cabo con la colaboración de Cruz Roja (y que no es en directo, sino en formato podcast), recibió el voto unánime del jurado del galardón, por entender todos sus miembros que ese programa «plantea una visión inclusiva, didáctica y terapéutica de la comunicación» y porque «motiva a los niños a conocer y participar del periodismo, de la búsqueda y elaboración de noticias, trata de despertar en ellos el interés por el mundo que les rodea», con el valor añadido de hacerlo «en el difícil ámbito de un hospital en el que esos niños están ingresados».
Las grabaciones de 'Radio Tirita'se realizan todos los miércoles, de 17,00 horas a 19,00 horas, en la Scape-Gela del hospital y los programas se suben semanalmente en el blog de la OSI de Ezkerraldea, Enkarterri y Cruces https://osieec.osakidetza.eus/scapegela/es/radio-tirita/
Radio Tirita, ha explicado el jurado del Premio, divierte a los niños «les hace ser activos, les motiva, despierta su curiosidad por el mundo», y además «es una hermosa función del periodismo que nos presenta su faceta más inclusiva, más humana, más al servicio de todos los ciudadanos, a los que incorpora al diálogo social, incluso en situaciones y lugares que podrían llevarles a la incomunicación, a la exclusión».
El premio, dotado en esta edición con 1.250 euros, se entregará en un acto organizado por la Asociación y Nissan Ávila durante el mes de noviembre, en una fecha concreta que se dará a conocer próximamente.
periodista y voluntaria. Naiara Serrano, voluntaria de Cruz Roja desde que tenía 15 años, explicó que ella no es «la ideóloga de este programa», que aunque se planteó antes de la pandemia no pudo ser llevado a efecto hasta 2022, agradeció al jurado que hubiese premiado su trabajo, que comentó que realiza con «niños cuyo perfil es muy heterogéneo, unos son muy habladores y te dan mucho juego y a otros te cuesta muchísimo sacarle las palabras», pero que en esencia «es muy agradecido, sobre todo porque sales de allí viendo que unos niños que lo están pasando mal porque están enfermos lo pasan muy bien».
Haciendo este programa, añadió, «se aprende mucho de los niños, te dan mil vueltas y a veces me dejan a mí sin palabras. El mayor aprendizaje que tengo de ellos es la capacidad que tienen de adaptarse a todo. Están en un hospital, en situaciones en las que probablemente muchos adultos estaríamos quejándonos, enfadados, mucho más apáticos que ellos, pero les proponen ir a hacer una actividad, vienen, se sientan y al ratito están riéndose, disfrutando, hablando de cosas que no tienen nada que ver con el hospital. Y un poco lo que hacemos allí es eso, no hablar de las enfermedades ni de lo tristes que pueden estar, sino que nos reímos y hablamos de otras cosas completamente diferentes. Y esa es, en esencia, la mayor enseñanza que ellos ofrecen, que es mucha».