Editorial

Incomprensibles trabas para quienes apuestan por emprender

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El presidente de los empresarios abulenses, Diego Díez, denuncia en una entrevista que publica hoy este periódico que uno de los problemas que tienen las empresas que quieren implantarse en nuestra provincia es que tienen que superar unos trámites administrativos y unas trabas burocráticas derivadas de unas exigencias que, a su juicio, son mayores que en otras provincias. Siendo la legislación igual que en otros territorios, desde CEOE Ávila se considera que en Ávila se aplica con más exigencia y menos flexibilidad. Si a esto se añade lo que también plasma Díez en la entrevista, los eternos problemas de las comunicaciones y la persecución fiscal, se entiende perfectamente lo que está pasando en el tejido empresarial abulense, que es que en el año 2022 cerraron más de 400 empresas y que ya no se recuerda la llegada de una compañía potente que alivie el problema del mercado laboral abulense. Leyendo al presidente de los empresarios, que siga habiendo emprendedores en Ávila parece más un milagro que otra cosa.

Cuando tendría que suceder todo lo contrario, que habría que tender un puente de plata, siempre dentro de la legalidad, por supuesto, a quien decidiera apostar por Ávila como sede de su empresa, resulta que se le ponen todas las pegas posibles y cuando está implantado, si eso llegara a suceder, hay quien se dedica a presionar desde el punto de vista fiscal con inspecciones que parece que en otros lugares o no son necesarias o se hacen de otra manera, con otro talante y no con el fin de fastidiar a quienes están generando riqueza hasta el punto de 'obligarles', quizá incluso sin comillas, a cambiar su domicilio fiscal a otra provincia.

No parece muy lógica toda esta situación, que debería llamar a la reflexión. A las administraciones, para que sepan que con su burocracia no están ayudando a que Ávila crezca. Que se lo hagan mirar y repasen las tramitaciones que exigen a los empresarios que quieren colaborar a que la provincia mejore.

Por lo que deja entrever CEOE Ávila, hay sectores económicos que en la provincia pueden tener un nicho, si no de mercado, sí de implantación para poder encontrar aquí un lugar desde el que desarrollarse. La ciberseguridad, las nuevas tecnologías, la agroalimentación, las energías renovables, la automoción y, por supuesto, el turismo, son algunos de ellos que se apuntan por parte de los propios empresarios. Como se ve, oportunidades, y muy diversificadas, hay. Ahora sólo falta que si a alguien le da por apostar por ellas en Ávila, pues que se le facilite el que pueda llegar a nuestra tierra. O, al menos, que se no se le pongan problemas.