Después de cuatro días de intensa actividad, en los que la climatología fue benigna (la deseada lluvia sí llego pero cayó de noche y no estorbó a su desarrollo), la Feria del Libro de Ávila tocaba este domingo a su fin con una jornada en la que los comentarios de sus protagonitas eran de satisfacción por haberse cumplido, en esencia, sus buenas expectativas.

Gemma Orgaz, presidenta de la asociación de librerías de Ávila, resumía que la valoración del desarrollo de la Feria era «bastante positiva», ya que «el buen tiempo y nuestra ubicación en el centro de la ciudad, entre terrazas, paseantes y turistas, ha hecho que hayan sido muchos los visitantes de las casetas; de hecho, hay gente que ha venido de fuera para visitar la Feria». Las ventas de libros, añadió, también han sido buenas, por lo cual «la valoración en general no puede ser más que positiva, y ya estamos casi mirando a la cita del año próximo».

Valoró también Gemma Orgaz la importancia de la instalación de una carpa para acoger actividades paralelas a la venta y firma de libros, ya que «es un plus tener todo concentrado en el Mercado Grande, no tiene sentido llevarse las actividades lejos de la Feria; y no ha llovido, pero si lo hubiese hecho allí podría haber habido actividad».

última jornada. La cuarta y última jornada de la Feria ofreció como actividades principales tres homenajes a cuatro autores de nuestra provincia. El primero fue para el matrimonio formado por Teresa Barbero y Joaquín Fernández, creadores de la revista cultural El Cobaya a mediados del pasado siglo y autores de renombre a nivel nacional; el segundo fue para el poeta Juan Pedro Fernández Blanco, fallecido el pasado mes de febrero a los 43 años de edad; y el tercero para una figura tan grande como la de Teresa de Jesús, de quien se hizo una lectura pública elegiendo para la ocasión algunos de sus brillantes textos en prosa (el pasado año se hizo lo propio con su poesía).

Además, hubo un taller de escritura creativa para adultos que impartió Yolanda Jiménez, complentando así un amplio, variado y atractivo programa de actividades de celebración de la literatura que ha contado con la complicidad de mucha gente que disfrutó, durante cuatro días, de un Mercado Grande especialmente atractivo.