Ucrania lanzó hoy una intensa campaña diplomática ante la ONU y la OTAN con el fin de recabar más apoyos entre la comunidad internacional en su guerra con Rusia, que ha buscado refugio en China e Irán, sus principales aliados en la contienda.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, llegó hoy a Nueva York para intervenir ante la Asamblea General de la ONU, participar en una reunión del Consejo de Seguridad y reunirse con varios líderes mundiales.
Zelenski ante la ONU
A pocas semanas de que el invierno ralentice la contraofensiva ucraniana, Zelenski necesita el respaldo del mayor número de países posible tras el feo que recibió en la reciente cumbre del G20 en la India, que se quedó corta a la hora de condenar a Rusia.
Para empezar, el líder ucraniano demandó hoy que Rusia sea excluido como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.
"Es una pena, pero todavía hay un lugar para los terroristas rusos", dijo.
Zelenski subrayó hoy la importancia de defender la "integridad territorial" de los países y la necesidad de que la ONU disponga del poder para frenar "la agresión" de Rusia.
"Es evidente que el mendigo de Kiev, dependiente en todos los sentidos, volverá a implorar dinero y, en consecuencia, armas a sus amos estadounidenses", dijo María Zajárova, portavoz de Exteriores rusa, en rueda de prensa.
El presidente ucraniano tiene previsto viajar a Washington para reunirse con el presidente de EEUU, Joe Biden, que también intervendrá el martes ante Naciones Unidas.
Biden también solicitará más asistencia internacional para Kiev, que lanzó el 4 de junio una contraofensiva que le ha permitido recuperar varios cientos de kilómetros cuadrados de territorio.
También tiene cita el miércoles con el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien aseguró hoy en Nueva York que la guerra en Ucrania es una prueba de la "incapacidad" de la organización.
Abrams de EEUU y tanques europeos
Por su parte, el nuevo ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umérov, participa el martes por primera vez en la reunión del grupo de contacto en la base aérea de Ramstein (Alemania).
El secretario de Estado de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, instó hoy a sus homólogos del grupo para la defensa de Ucrania a seguir suministrando defensa antiaérea, interceptores y munición a largo plazo.
"Lo dije antes y lo diré de nuevo. La defensa antiaérea está salvando vidas", subrayó Austin al referirse a los suministros que ya se han hecho, entre otros, de sistemas Patriot, Iris-T, Hawk, NASAMS y SAMP/T.
Adelantó que Washington suministrará "pronto" a Kiev los ansiados tanques Abrams, equipos cruciales para una contraofensiva que "sigue avanzando con paso firme".
A su vez, el ministro de Defensa de Dinamarca, Troels Lund Poulsen, anunció que donará a Kiev otros 45 tanques, de los que una treintena son Leopard 1 y quince son T-72.
Dinamarca ya anunció el mes pasado que entregará 19 cazas F-16 a Ucrania, seis de ellos a finales de este año, mientras que el próximo año se enviarán otras ocho unidades.
Rusia se refugia en China e Irán
Mientras, el ministro chino de Exteriores, Wang Yi, se reunió este martes en Moscú con el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Nikolái Pátrushev, para hablar de temas de seguridad estratégica.
Pátrushev dijo haber abordado con Wang la cooperación militar y técnico-militar y la necesidad de contrarrestar la injerencia en los asuntos internos de los países.
Consideró fundamental la coordinación entre ambas potencias justo cuando Occidente ha lanzado "una campaña para contener a Rusia y China".
Además, adelantó la próxima visita del presidente ruso, Vladímir Putin, en octubre al gigante asiático, su primer viaje al exterior en 2023.
El viaje de Wang a Moscú siguió a su reunión con el consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, en Malta, que la Casa Blanca calificó de "sincera y constructiva".
Además, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, llegó hoy a Teherán al frente de una delegación para reunirse con la cúpula militar de Irán, que ya ha suministrado drones al ejército ruso