El grupo del Partido Popular en el Ayuntamiento de Ávila insistió este jueves en que su propuesta para las ordenanzas del próximo año pasa por "no penalizar fiscalmente a los vecinos", lo que implica una "bajada de impuestos" como punto de partida y frente a la "subida generalizada" que ha planteado Por Ávila en ámbitos como los bienes inmuebles (de casi el 10%), la recogida de basura (del 44%), la circulación de vehículos (del 5%) o el agua (entre el 3 y el 20%). El concejal Jorge Pato explicó que a unos días de que se lleve a cabo la comisión extraordinaria de Hacienda en la que se abordará el asunto, prevista para la próxima semana, "el PP no ha recibido ningún contacto para una negociación" del proyecto de ordenanzas. De esta manera, y salvo cambio en el planteamiento inicial, en el PP creen que el equipo de gobierno de Por Ávila, que está en minoría, "deberá buscar apoyo en otras formaciones. Veremos hasta dónde está dispuesto a ceder Por Ávila y hasta dónde se va a incumplir el programa del PSOE, que hablaba de bajar el IBI", no en vano "mucho nos tememos que volverá a ser un 'sí pero no' como ocurrió hace cuatro años con el socio de gobierno", dijo en referencia a un hipotético apoyo del PSOE.
Jorge Pato aseguró que el PP apuesta por "estimular la economía" y por "una Ávila fiscalmente atractiva" para la implantación de empresas y la creación de empleo, para lo que proponen "la rebaja del IBI a empresas de nueva implantación, con una bonificación del 2,5% durante cinco años por cada nuevo empleo hasta un máximo de 20 trabajadores", además de la vuelta a los niveles de 2019 en este impuesto para toda la población, antes "del hachazo de Por Ávila". Además, para el impuesto de circulación plantean una bonificación del 10% para las empresas profesionales del transporte con domicilio fiscal en Ávila con el objetivo de que la ciudad se convierta en un "referente logístico nacional". A esto se uniría, dijo, una bonificación acumulable de hasta el 17% en función del número de vehículos y sus características.
El concejal del PP contrapuso esta propuesta con la del alcalde, a su juicio "el único responsable" de lo que calificó como "un atraco a mano armada" y de quien dijo que "pierde subvenciones, hace obras ineficaces o mantiene siete liberados mientras nos fríe a impuestos". En este marco, le pidió a Sánchez Cabrera "responsabilidad para gestionar el dinero de los vecinos", que es "lo primero que se debe exigir a un alcalde", y remarcó que el PP "no va a ceder a los chantajes en los que se nos amenaza con recortes". Así, añadió que "recortes sí, pero en número de liberados; los abulenses no quieren un alcalde que antes de bailar el pasodoble les sube los impuestos".