Fundabem continúa dando pasos para la apertura de su primera tienda de ropa de segunda mano: un establecimiento que esperan poder tener abierto en noviembre, llevará por nombre 'Volveré' y que estará ubicado en la calle San Millán, justo al lado de la plaza del Mercado Grande.
Será una tienda de moda, explica a Diario de Ávila Samuel Hernández, director gerente de Fundabem, con prendas de segunda mano pero de las que están catalogadas como 'crema'. «La ropa de segunda mano se clasifica en cuatro categorías», aclara sobre este punto Hernández. Y de esas cuatro categorías, la más elevada sería la categoría 'crema'. «Hablamos de ropa de marcas conocidas en perfecto estado», apunta el principal responsable de Fundabem.
Será ropa, además, ajena al circuito de recogida y recuperación de ropa que Fundabem realiza en Ávila. Y es que es una empresa ajena a esta entidad la que les compra la ropa y la clasifica en función de esas cuatro categorías y, posteriormente, las reparte entre empresas del tercer sector de todo el país.
«Nosotros compraremos los lotes ya clasificados», prosigue explicando Hernández, que sabe bien que de esta manera todo el mundo de Ávila podrá entrar a la tienda y encontrar algo que no haya sido aportado por él mismo.
Ahora, Fundabem trabaja en las obras de acondicionamiento del local que les ha sido cedido (de manera gratuita durante cuatro meses) para la apertura de 'Volveré'. Contratiempos de última hora, como las humedades aparecidas en una pared o el agua que entró por otra zona del almacén a causa de la última tromba de agua que cayó sobre Ávila, están retrasando una apertura que querrían haber podido celebrar ya, pero que tendrá que esperar ahora, en principio, al mes de noviembre.
La futura tienda de moda tendrá, nos comenta Hernández, un cuidado y estudiado diseño, muy alejado del concepto de 'mercadillo' que pueda tener la gente en la mente cuando piensa en ropa de segunda mano.
Su imagen será limpia y moderna, y con ella esperan poder atraer a un público con dos perfiles principales. «Por un lado, esperamos contar con un público joven, de gente si perjuicios y quizá más habituada a este tipo de negocios», empieza a hablar Hernández, que sabe que en toda Europa abundan las tiendas de ropa de segunda mano. «Y queremos llegar también a gente concienciada con el cuidado del medio ambiente», apunta el segundo perfil de sus futuros clientes: personas conscientes del ingente volumen de ropa que se tira cada año en todo el mundo y de lo que contaminan las empresas textiles.
«La tienda será preciosa y tendremos en el almacén género para renovar constantemente. Y, además, se podrá estar en contacto con la tienda para que te avisen si llegan productos que te interesan», prosigue hablando uno de los principales impulsores de una iniciativa que, además, dará empleo directo como dependientes a dos personas con discapacidad.
Para poder poner en marcha 'Volveré', Fundabem ha contado, además de con la cesión gratuita por unos meses del local con ayudas directas de la FundaciónLa Caixa de un premio otorgado en Sevilla. «Esto demuestra que la gente confía en la economía circular como desarrollo sostenible y generadora de empleo», presume Hernández.
PRÓXIMOS NEGOCIOS. Por cierto que una vez que esté en marcha 'Volveré', Fundabem tiene entre sus objetivos abrir un segundo (e incluso un tercer) negocio con ropa de la considerada de primera categoría: también en muy buen estado aunque un escalón por abajo de la 'crema'. «Este local ya no estaría tan céntrico», apunta Hernández, que aclara que entre la ropa de segunda categoría se encuentra aquella que se dedica a exportar a países en vías de desarrollo. «Y la tercera categoría es la que no se puede volver a usar y se emplea para fregonas, aislantes...» El problema de esta ropa, señala el director gerente de Fundabem, es que exige que se le extraiga la tinta, que es lo más contaminante . «Y en España no hay suficiente industria para sacar la tinta, es un proceso muy caro. Pero es a lo que hay que tratar de llegar, para ser sostenibles y poder aprovechar así el cien por cien de la ropa», defiende Hernández, que siente que aún queda mucho para llegar a ello pero que sabe también que «estamos creando estructuras para que se pueda llevar a cabo».
Por último, Hernández recuerda que su mercadillo en las Hervencias sigue en funcionamiento.
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