Ganar se convierte en una necesidad

A.S.G.
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El Ávila Auténtica regresa un mes después de su último partido recibiendo al UEMC Real Valladolid. "Tenemos que competir y ganar el partido. El mensaje debe ser este".

Ganar se convierte en una necesidad - Foto: David Castro

Competir y ganar. Son las dos premisas, y ambas igual de urgentes y necesarias, con las que el Ávila Auténtica El Bulevar vuelve de nuevo al parqué. Lo hace después de un largo mes parados, demasiado tiempo como para poder calibrar si los de José Antonio Sánchez tendrán la chispa necesaria como para conseguirlo. Y lo necesitan. De lo que no duda el técnico madrileño es que de lo que van sobrados los suyos es de ganas, y a ello se agarran los verderones ante la visita, a puerta cerrada, del UEMC Real Valladolid Baloncesto, que pisará a partir de las 19,00 horas un CUM Carlos Sastre que sin su ‘Marea Verde’ parece haber perdido buena parte de su alma. Deberán ponerla los jugadores. «Espero que las ganas y el deseo suplan la falta de competición y el feeling de no haber competido»  analizaba José AntonioSánchez ante un curso que está siendo muy complicado.  

Un periplo con el que el equipo afronta un partido que debe ganarse sí o sí. Por resultados, por moral, por sensaciones... «Jugando bien o no, tenemos que ganar el partido. Este es el mensaje. Tiene que ser un punto de inflexión para ganar partidos de manera consecutiva» no oculta José Antonio Sánchez ante un UEMC Real Valladolid que pisa el CUM Carlos Sastre como último clasificado y una única victoria en ocho partidos. «Es un equipo  cuyos mejores jugadores entrenan con el LEB Oro. Aglutinan los mejores jugadores jóvenes de Valladolid» detalla el técnico madrileño ante un conjunto «de ritmo alto» de juego, «en ocasiones incluso anárquico o alocado» por sus características y del que destaca a Juan López,Barroso o Domingo, «jugadores con un perfil exterior que juegan con mucha presión y rapidez. Tienen talento».  

‘Filomena’ y el riesgo de colapso del pabellón abulense obligaron a suspender un partido que debía haberse disputado la pasada semana. El ‘OK’ del Ayuntamiento al uso del pabellón llegó ya con el partido aplazado. «Aunque no lo parezca la liga ha empezado. Está siendo un vía crucis coger este año la regularidad y tener la continuidad mínimamente deseable» señalaba el técnico ante una falta de continuidad sobre la pista que está mermando considerablemente al proyecto verderón. Y sin competición, «incertidumbre. No podemos controlar lo suficiente ciertos aspectos. Suficiente hemos tenido con poder entrenar con regularidad estos últimos días después de todo el problema de la nieve y tener que parar los entrenamientos. Pero no queda otra». Un parón en el que reconoce la predisposición de sus jugadores. «Volver a entrenar fue como un regalo. Toca aclimatarse en el menor tiempo posible a vivir en esta incertidumbre, no sólo deportiva».