Recorrer el valle de Amblés y la sierra de Ávila para conocer historias legendarias de prodigios y ritos ancestrales, adentrarse en La Moraña y descubrir los secretos de linajes nobles, brujas y antiguas ciudades. Viajar por los escenarios de milagros y gestas caballerescas en el Valle del Tormes y Corneja; atravesar el Alberche y la Tierra de Pinares, hogar de seres míticos y luminarias. Visitar los pueblos del Tiétar, con sus castillos de leyenda, vírgenes y princesas. Es la propuesta que el periodista y divulgador José Talavera nos hace a través de '50 lugares mágicos de Ávila'.
Un libro que, como el propio autor indicó durante su presentación este jueves en el patio del Torreón de los Guzmanes, sede de la Diputación Provincial, muestra hasta 50 enclaves abulenses donde aún se mantienen vivas las leyendas, ritos, creencias y tradiciones mágicas. Y lo hace incluyendo indicaciones sobre cómo llegar y coordenadas GPS.
Se trata del octavo libro de Talavera, que tiene su germen en un trabajo que comenzó cuando trabajaba en Radio Castilla-La Mancha, donde comenzó a recopilar leyendas y misterios de aquellas tierras, en torno a los 400, y que continuó ya en la Cadena Cope con una sección en la que hablaba de leyendas de España. «Muchas de las que aparecen en este libro salieron de ahí», explicó el escritor, que se mostró encantado de estar en Ávila, arropado por familiares y amigos en un acto de presentación que tuvo al presidente de la Diputación, Carlos García, y a los escritores José Pulido y José María Muñoz Quirós como acompañantes en este viaje mágico por la provincia.
«Ávila es una provincia tan rica en personajes históricos que era complicado seleccionar 50 historias y leyendas», señaló José Talavera, que decidió dividir el libro en las cinco comarcas «intentando equilibrar con diez capítulos de cada una y así empecé».
Entre esas historias las hay muy conocidas, como las de El Rey Niño o la calle de la Muerte y la Vida en Ávila capital, pero también las hay algo más desconocidas, como la Leyenda de Ojos Albos, el pastelero de Madrigal de las Altas Torres que quiso reinar o el Cubo de la Mula de El Barco de Ávila, por poner algunos ejemplos. Pero el autor quiso destacar algunos lugares y personajes mágicos que encontró en ese camino, como el castro de Ulaca, Tiñosillos y su fiesta de la Pascua Rosquillera, Fontiveros, la beata de Piedrahíta, Las Luminarias de San Bartolomé de Pinares o el Castillo de la Triste Condesa de Arenas de San Pedro.
De este libro, que tiene como prologuista al poeta abulense José María Muñoz Quirós, el presidente de la Diputación subrayó que «singulariza el orgullo de pertenencia a esta provincia a través de sus tradiciones y su cultura, y refleja en sus hojas esa ilusión que tiene la gente de pueblo, que no necesitamos que nos hablen de la grandeza del medio rural».