La jornada de drones recuerda que "no son un juguete"

B.M
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La cita celebrada en la Escuela Politécnica recalca la importancia de conocer la normativa y explica aplicaciones en temas como plantas fotovoltaicas, incendios forestales o accidentes

La jornada de drones recuerda que ·no son un juguete"

La Escuela Politécnica Superior de Ávila acogió una jornada donde se abordó la reglamentación de los drones y sus aplicaciones en geomática y topografía, con la intención de dar a conocer el marco normativo actual y futuro que regula en uso de estas aeronaves con fines profesionales y para lo que se contó con diferentes expertos de la mano de la propia escuela de la USAL, la Escuela de Pilotos Adventia y el Colegio Oficial de Ingeniería Geomática y Topografía.

Fernando Gómez, de la Escuela de Pilotos Adventia, explicó que la «normativa traslada que el dron no es un juguete, es un aparato que interfiere con otros elementos, principalmente en el aire con los aviones o las aeronaves» y, por tanto, el uso tiene que ser «profesional y estudiarse todas las medidas de seguridad, como en una operación aeronáutica normal».

Incidió en que la normativa «desde el minuto cero regula toda la operación que puedan tener los drones» e indica aspectos como las zonas excluidas de operación por riesgo porque «toda la normativa aeronáutica se basa en la seguridad». Para ello también se cuenta con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, que «controla que se está haciendo bien», además de que las operaciones con dron, «cuando ya tiene cierta envergadura tienen que estar comunicadas, autorizadas». 

El problema, recalcó, es «el desconocimiento que hay de la norma» porque mucha gente se piensa que «operar un dron no pasa nada» y luego se encuentra con graves sanciones o graves problemas como se vio recientemente en Barajas y que cree que se repetirán en otros aeropuertos de España. «Por desgracia va a ser una noticia recurrente en los próximos tiempos», aseguró.

Por eso considera importante trasladar a la sociedad unas «nociones básicas», que sepan que se tienen que «capacitar» si quieren tener un uso profesional.

Respecto a esta capacitación, señaló que hay que consultar los usos, donde se puede o no utilizar, y apeló al sentido común. Y también a la información que hay a través de la página de seguridad aérea, con catálogos y folletos, y tener claro que hay que capacitarse previamente para utilizar estos aparatos. Esta formación depende del tipo de operación y aparato pero fundamentalmente son cursos teóricos y prácticos, parecidos al de piloto privado pero en la parte más básica reducido a unos 60 horas, aunque luego dependerá del tipo de dron y el escenario operativo.

Precisamente respecto a las operaciones, en la jornada también se abordaron las aplicaciones prácticas que puede tener el uso de drones. Fue Diego González Aguilera, catedrático de la Universidad de Salamanca, el que se refirió a las posibles aplicaciones, donde se encuentran, por ejemplo, infraestructuras complejas desatendidas donde hay que automatizar ciertas tareas o plantas fotovoltaicas donde hay que realizar el mantenimiento y ver si alguna de las celdas de la placa está dañada y cómo se puede automatizar.

También hay una importante aplicación en incendios forestales dado que el dron tiene la posibilidad de volar de noche, en momentos donde la navegación tripulada no puede y así se ayuda a perimetrar el área afectada y ver el avance del fuego. Otro posible uso se centra en escenarios de seguridad, con accidentes de tráfico, donde pueden aportar «mucho valor a la hora de analizar el accidente, no solo el impacto que ha sufrido el vehículo sino todo el escenario alrededor».

En cuanto a nuevas investigaciones y usos de futuro, González Aguilera se refirió al «reto» de la navegación autónoma en interiores donde la señal GPS no llega.

Por otra parte, el catedrático de la USAL destacó la «magnífica aceptación» que tuvo la jornada y la presencia de un «público muy joven», lo que puede servir, reflexionó, como una forma de motivarles para que «apuesten por ingenierías como las que se imparten» en la Escuela Politécnica.

En la jornada también se contó con la presencia de Íñigo García, delegado territorial de Castilla y León en el Colegio Oficial de Ingeniería Geomática y Topografía, que recordó el convenio existente con la universidad para formación continua y atracción de estudiantes y señaló que el uso de drones puede ser una «herramienta más» para el trabajo en topografía con aplicaciones en medidas o análisis.