Carolina Ares

Escrito a tiza

Carolina Ares


Huerto aromático

25/05/2024

Cuando el calor llegue a Ávila y nos deslumbré el sol, voy a cultivar un huerto de aromáticas para cuidar con candor. Será como una promesa de verano que me sirva de ilusión.

Albahaca para perfumar a los reyes, para espantar a los mosquitos, para elaborar un pesto genovés o para hacer salchichas si eres inglés: para estimular las papilas gustativas y mostrar amor a la italiana. Si te la dan en Grecia, sin embargo, ten claro que te odian o si te la encuentras, tendrás desgracias. En India es casi sagrada, en algunas regiones de Europa un símbolo de Satanás. En el Caribe te libra de los espíritus oscuros mientras que en México llama a la fortuna. Échenla al tomate aderezado con aceite y disfruten del manjar.

Hierbabuena para regalarte el oído, para refrescar tu olfato y estimular la nariz, para disfrutar con un buen mojito, en chicles y caramelos, en guiso e infusión. Hierbabuena hasta en la sopa, o acompañando al cordero en Inglaterra: hay hasta quién se baña en ella. Vale casi para todo: dolores e inflamaciones y también para desinfectar. La hierba que dicen nunca muere, es una amiga que no te puede faltar.

La menta es su hermana: comparte propiedades curativas y hasta su fragancia es similar. Sin embargo, la gana en mentol y tiene un cúmulo variedades que nos da gran variedad de elección. En Marruecos es fundamental, si te la ofrecen formarás parte de la tradición: serás bienvenido y respetado. La hospitalidad, para ti, habrán desplegado. En Egipto ya te utilizaban, en Grecia, Aristoteles la nombró afrodisiaco y Perséfone convirtió una Ninfa en menta: hasta en la Biblia San Lucas habla de ella.

Orégano, el rey de la pizza. De todas estas hierbas, la única que recuerdo la primera vez que la comí: me sorprendió, fue inesperada. Sabe a viaje por Italia, a campos de girasol y trattorias con terraza. A museos plagados de obras maestras y camisetas de rayas. Es bueno para el cabello, para la piel y se usa mucho en aromaterapia. Pero ojo con las contraindicaciones.  Cómelo con carne y pescado y con las aceitunas también encaja. Dicen que Afrodita plantó la primera, que en la Edad Media la quemaban cuando llegaban las epidemias para evitar el contagio. La llaman la planta de la felicidad: disfruten cuándo la están cocinando.

Romero contra el mal de ojo, símbolo de la buena fe y la riqueza, la hierba de don Quijote, base del bálsamo de Fierabrás y en Andalucía el perfume de la Nochebuena. Es la última planta que añades al guiso y la más dura de cortar. Sirve para pescado y carne y al horno también la saborearás. Sus aplicaciones para la salud son numerosas. Se la usa en farmacología y se la estudia sin parar. Vale para la artritis y para el pelo, toses, canas y un sinfín de cosas más.

Esto es solo un ejemplo de lo que quiero plantar: salud, cultura y positividad. Voy a cuidar mi huerto, lo regaré con amor. Cantaré a Simon y Garfunkel y soñaré con su sabor. Apartaré las babosas y los caracoles: aquí solo queremos lo que nos permita prosperar. Cuidando estas plantitas todo habrá de avivar.