Ávila tendrá cinco parques comarcales de bomberos para atender los incendios en la provincia. Llegarán de la mano de la Diputación y en todos ellos hay avances, puesto que se ha cerrado el ciclo de adjudicaciones de las obras, una vez que ya hay empresa para el de Cebreros, aunque está pendiente de pasar por la Junta de Gobierno de la institución provincial.

La plataforma de contratación hizo pública la adjudicación de las obras para el parque de Cebreros, que finalmente correrá a cargo de la empresa Ceviam EPC S.L. con un presupuesto de 1,27 millones de euros y un plazo de ejecución de diez meses.

Según informó en su día la Diputación de Ávila, a finales de mayo comenzaron los primeros trabajos del Parque Comarcal de Bomberos del Bajo Tiétar en Ramacastañas (Arenas de San Pedro), y en mayo llegó el arranque de las obras de las infraestructuras del Alto Tiétar (Sotillo de la Adrada) y La Moraña (Arévalo).

En el caso del parque de Sotillo, el presupuesto de adjudicación es de casi 1,3 millones de euros, cifra que supera ligeramente el parque arevalense. El plazo de entrega de las obras se situaba en diez meses.

Eso dejaba pendiente el inicio del de la zona de Alberche-Pinares, el situado en Cebreros, y el acondicionamiento de la nave de Piedrahíta que albergará el parque de Barco-Piedrahíta-Gredos.

En el caso de Piedrahíta, a finales del pasado mes la se conoció la adjudicataria, en un proyecto que es una adecuación y no de nueva planta.

En Cebreros, la construcción se resuelve en menos de 850 metros cuadrados construidos. El hangar o cochera tiene aproximadamente 20 metros de ancho por 14 de fondo, con cuatro portones y doble acceso frontal y posterior. Una pasarela permite el acceso a la parte superior de los vehículos estacionados, y hay un foso de mantenimiento.

 A la cochera se accede principalmente a través de la zona de sucio, que comunica con la zona técnica, generando una circulación eficiente por la parte trasera del hangar y no interrumpida por los vehículos estacionados. Es posible acceder también desde la zona administrativa, sin necesidad de atravesar el área técnica. Destaca el espacio que alberga los EPIs, en el que se ha optado por una configuración diáfana para facilitar y acelerar la colocación del equipo.

En el área administrativa, la sala de control sirve también de enlace entre el hangar y el resto de dependencias.

En la primera planta, los cuatro dormitorios y la sala de estar se abren a la fachada principal, y el comedor y el gimnasio a la fachada posterior. En el centro de la planta se encuentran los vestuarios y la cocina, sin huecos a fachada –garantizando así la privacidad– pero iluminados cenitalmente y al igual que la escalera con lucernarios que aportan luz natural y contribuyen al ahorro energético.

Ya en su día, el presidente de la Diputación de Ávila habló de estos parques de bomberos como «un servicio prioritario, elemental y básico» para la institución provincial. Se busca «dotar de servicios prioritarios que garanticen la seguridad de todos y cada uno de los abulenses que residen en el medio rural en una materia compleja como son los incendios urbanos».