Chamartín conmemora su fiesta de Lugnasad

VICENTE GARCÍA
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El renacer de la cultura celta en la Península Ibérica

Visita guiada y teatralizada, al castro de la Mesa de Miranda - Foto: Vicente García

Fueron los Vettones un pueblo poco conocido a pesar de su intensa actividad. Desde el siglo IV al II antes de Cristo vivieron su época dorada en nuestra península de forma paralela e independiente a la de otros pueblos celtas. Nuestros antepasados habitaban principalmente las tierras centrales de España y, sobre todo la provincia abulense en la que destacan numerosos castros. Algunos llegaron a forma grandes núcleos urbanos en constante expansión como el de la Mesa de Miranda (Chamartín) o el de Ulaca (Solosancho).

Aunque esta cultura llegó a ser floreciente, su escasa vida (entre el 400 y el 150 a. C) y el repentino abandono de sus poblados ante la llegada de las campañas de Aníbal, según algunos historiadores, la sumió en el olvido; pero su ocaso total se produjo con toda seguridad ante la presión implacable de las legiones romanas que colonizaron el territorio.

En aquel momento estos castros, como el de Chamartín se olvidan y desaparecen, algunos sin dejar apenas rastro ocultados por la erosión, invadidos por la vegetación y fundiéndose con la naturaleza…

Una de las comparsas que acompañaron en el mercado agroalimentario en años anteriores.Una de las comparsas que acompañaron en el mercado agroalimentario en años anteriores. - Foto: Vicente García

Mucho tiempo después, y casi por casualidad por el hallazgo de restos por los lugareños, y gracias al ímpetu y esfuerzo de arqueólogos como Juan Cabré y Antonio Molinero que iniciaron los trabajos de excavación en 1930, comenzaron a recuperarse múltiples ajuares y revivirse historias del pasado. Actualmente queda aún mucho por excavar e investigar y seguro que los diferentes estudios que están por llegar nos descubrirán nuevos datos, cada vez más sorprendentes de este pueblo tan singular.

Los vettones eran considerados como guerreros duros e incansables. Tanto los restos arqueológicos recuperados de armas y escudos, o los escritos de autores antiguos como Estrabón, atestiguan que pasaban la vida prácticamente luchando o descansando y haciendo pausas para la guerra. Incluso las legiones romanas, una vez asimilados en su ejército los colocaban a la cabeza en las batallas debido a su fiereza y poderío.

Pero también estos hallazgos encontrados en los castros como el de Chamartín, demuestran que eran mucho más que eso: Piezas finamente labradas, fíbulas, adornos y cerámicas demuestran que poseían una sensibilidad especial y que también demostraban un gran respeto por la naturaleza y los astros.

Chamartinos ataviados de vettones en las primeras ediciones de LugnasadChamartinos ataviados de vettones en las primeras ediciones de Lugnasad - Foto: Vicente García

Se especula también que los hitos hallados en los castros como el chamartino podrían señalar diferentes constelaciones estelares.

Chamartín, junto con Solosancho fueron los pioneros en reivindicar su pasado vettón y celebrar la fiesta de Lugnashad; la importancia de los constantes descubrimientos ha producido el renacimiento de un sentimiento profundo hacia las raíces vettonas abulenses que va permitiendo conocer, poco a poco, algunos de los aspectos más enigmáticos de esta ancestral cultura.

La fiesta de la cosecha y la luna llena-Un buen ejemplo es la celebración de la fiesta de Lugnasad. Las dos primeras semanas de Agosto marcaban para los vettones el comienzo de la recolección, de la maduración de las frutas, una época mágica en la que las estelas monolíticas de piedra también señalaban los solsticios de invierno y de verano.

Aunque actualmente el carácter lúdico es uno de los principales motivos de estas celebraciones, se demuestra también el interés histórico de los habitantes y visitantes de Chamartín que llegan desde otros lugares de la provincia por conocer mejor su pasado.

El próximo fin de semana, el sábado 12 de Agosto se realizará como de costumbre una visita guiada y representada al castro de la Mesa de Miranda para recordar su historia, sentir cómo se pone el sol en este mágico lugar y observar el cielo nocturno plagado de estrellas. Desde hace años también tienen lugar aquí representaciones teatrales con diversos argumentos vinculados con el descubrimiento del castro vettón o con historias relacionadas con los guerreros y acontecimientos de esa época. En esta ocasión tendrá lugar un espectáculo de Tecno Folk, danza y percusión en el propio castro. El entorno privilegiado de este lugar y el momento especial en el que el sol se oculta y la luna comienza a aparecer, ofrecen sensaciones que el visitante no podrá olvidar en mucho tiempo.

Este año además tras una explicación estelar previa desde las entrañas del recinto, posteriormente se facilitará la observación de diversos planetas y constelaciones a través de varios telescopios situados en el pueblo donde aún el cielo puede ser contemplado con claridad sin apenas contaminación lumínica. La fiesta reivindicativa de nuestro pasado celta continuará en la plaza del pueblo con invitación por parte del Ayuntamiento y rito ancestral del aguamiel para expulsar a los malos espíritus.

El domingo 13 continuará la celebración con una ciclomarcha hacia el castro desde el Centro de Interpretación y la inauguración del clásico Mercado Agroalimentario y de Artesanía, que un año más se instalará en las calles del pueblo para ofrecer a los visitantes productos gastronómicos de la tierra y también manufacturas de todo tipo realizadas de forma artesanal. Todo ello amenizado con pasacalles para que no decaiga la fiesta; y durante toda la mañana se celebrarán talleres infantiles

Para los que deseen pasar por aquí el día entero, la opción del menú de patatas revolconas con torreznos, lomo y chorizo de olla, pan, agua y postre, será un aliciente más para degustar el menú a precio popular y seguir disfrutando de la fiesta vettona.

Durante toda la tarde sigue el mercado agroalimentario y de artesanía y se hará una demostración de perros de trabajo explicando su evolución a través de la historia y la relación con el hombre.

La organización de este evento por parte del Ayuntamiento chamartino y la inestimable ayuda de la Asociación local Atalaya, cuenta con la colaboración de la Diputación de Ávila, Terra Levis, Masav, Terra Carpetana, Quedadas estelares de astroaficionados y por supuesto los habitantes del pueblo que consiguen mantener dinámica a esta localidad de la sierra abulense.

(Más información en el periódico impreso y su edición digital).