La Junta de Castilla y León desarrollará durante los meses de verano las actuaciones contempladas en el 'Plan Estival 2018', dirigidas a proteger la salud de los ciudadanos a través de la intensificación de las labores de vigilancia, control e inspección alimentaria y ambiental. Recordó José Francisco Hernández Herrero, delegado territorial de la Junta en Ávila, durante la presentación de este plan que las actuaciones se desarrollarán principalmente en campamentos, piscinas y zonas de baño y hostelería, recordando que el pasado año en la provincia de Ávila se produjeron una decena de brotes de infecciones alimentarias que afectaron a 91 personas, de las cuales 6 necesitaron hospitalización. También se centrará la actividad de vigilancia y control en las aguas de recreo, incluidas las 86 piscinas al aire libre y la decena de cubiertas censadas en la provincia de Ávila, así como también en las tres zonas de baño de la provincia y en las que en 2017 se realizaron 27 inspecciones.