Sin incidencias relevantes y con la sensación de haber ofrecido una competición tan loca como divertida. Así finalizaba una de las citas otoñales ya clásicas en el calendario de la provincia, la carrera de autos locos de Piedralaves, que este año cumplía ya su undécima edición y que, como viene siendo habitual, volvió a congregar a numeroso público en todo el circuito urbano. Lo hizo, además, tras haber superado nuevas metas, lo que habla a las claras de la buena salud de una iniciativa que pone a prueba el ingenio y la velocidad de cada uno de los participantes con sus vehículos no motorizados e impulsados sin tracción.

Y es que esta undécima edición batió el récord de inscritos, 23 entre las dos categorías en liza, 17 vehículos de cuatro ruedas y 6 'trikes', con participantes de la propia localidad pero también de otros municipios de la zona.

El buen tiempo invitaba a acudir a esta cita y ya desde por la mañana había bastante ambiente por las calles de Piedralaves. Muchos de ellos se acercaron a la plaza de la Constitución para contemplar los autos que luego por la tarde participarían en la carrera, verdaderas obras de ingenio con aspecto de los más variopinto que causaron gran expectación, especialmente entre los niños.

La carrera más divertida y 'loca'Pero el plato fuerte estaba reservado para la tarde. Desde antes de las 17 horas ya el público comenzaba a situarse a lo largo del circuito, pero especialmente concentrado en algunos puntos como el puente de piedra, la calle Progreso y la ermita de la Concepción, donde estaba situada la meta. Ytras el habitual tiempo de espera para subir a lose vehículos hasta la salida en la calle Doctor Vasallo, comenzaba una prueba que desde luego no defraudó a nadie por su espectacularidad.

Una vez concluida la prueba y entregados los premios a los ganadores, Los Mozos de las Vacas, y a los más valorados por la originalidad de sus diseños por el jurado y el voto popular, 'Hogar dulce hogar' (único vehículo pilotado por mujeres), continuaba la fiesta, pero esta vez en el parque municipal, donde desde las 20,30 horas la música cobró protagonismo con el IIAlcornoke  Rock Festival, de la mano de tres bandas, Rock Royce, Black Hole y La Leñera.