Ávila volvió a convertirse en el mejor modelo al que pintar y fue gracias al XXXI edición del Certamen Nacional de Pintura Rápida Ciudad de Ávila, que llega de la mano del Hogar de Ávila en Madrid. Una oportunidad para plasmar rincones y panorámicas de la ciudad a través de los lienzos de artistas llegados desde diferentes puntos de España y que este sábado salpicaban la ciudad mientras sus obras iban tomando vida y generaban la curiosidad de los turistas y abulenses que pasaban junto a ellos.
120 adultos y 48 niños formaron parte de este concurso en el que, según señaló la presidenta del Hogar de Ávila en Madrid, Anunciación Guil, se contaba con la novedad de la participación de los chicos de la Escuela Municipal de Artes (42 de ellos), que se concentraron desde los Cuatro Postes para realizar sus obras y donde el jurado iba a pasar a verles. Ellos junto al resto de niños de la capital y la provincia competían por premios que llegaban desde la Diputación y que se dividen en dos categorías por edad.
En general, en este certamen hay más de 5.000 euros en premios, con una colaboración del Ayuntamiento de 2.000 euros, incluyendo los 1.600 del primero. Hay premios para adultos y niños (material de Bellas Artes), además del que llega desde la Asociación Española de Artistas y Escultores, no económico.
Una ciudad salpicada de artistas - Foto: David CastroEste año la participación en adultos ha descendido lo que se cree que es debido al aviso de lluvia que había, lo que hace que artistas se hayan echado para atrás. Aún así, desde el jurado se destacó que se contaba con pintores «muy buenos» llegados de lugares como País Vasco, Castilla-La Mancha, Madrid, Andalucía o Castilla y León.
Paseando por Ávila se podía ver a los pintores en diferentes lugares como el propio Episcopio, en los soportales de la Biblioteca, aunque después se moverían, algunas calles más cerradas plazas y sin faltar la Catedral, en algunos casos cogiendo perspectiva y en otros muy cera. En realidad, según explican desde la organización, se suelen colocaren lugares como las plazas del Mercado Grande y el Chico, calles del centro pero también se suben a la Muralla para buscar perspectivas.
Solo paseando por el centro se veía la vida que iban cogiendo las obras mientras los artistas iban mezclando colores, dando los primeros trazos o utilizando incluso tablets y fotografías.
Sonsoles Prieto, teniente de alcalde en funciones de Empleo, Industria, Comercio y Turismo del Ayuntamiento de Ávila, destacó que la ciudad «es una obra de arte» que se puede plasmar en los cuadros y se refirió a la participación de los miembros de la Escuela Municipal de Artes, de los que se sienten «muy orgullosos» por haberse decidido a participar.
Ellos son parte de los artistas que estarán pintado durante la jornada para que después por la tarde se proceda a la exposición de las obras en el Mercado Grande, formando una «galería de arte», y el mismo lugar donde se entregarán los premios.
Será tras la valoración que realizará un jurado formado por Anunciación Guil como presidenta pero también con artistas o críticos de arte como Pablo Reviriego, Carmelo San Segundo, Antonio Calderón de Jesús y Luis Javier Gayá.
La presidenta del Hogar de Ávila en Madrid recordó que el certamen abulense nació en 1989, convirtiendo a Ávila en la segunda ciudad que tuvo un premio de pintura rápida continuando vigente ahora, cumpliendo más de tres décadas de vida.
De Ávila dijo que «es un mural, un cuadro, un lienzo. Es luz» y así se refleja en un certamen en el que se quiere ir creciendo en la participación de los niños.
Los premios de este certamen incluyen un primero, dotado de 1.600 euros, y además otros seis de 600 euros cada uno. Además se conceden, con medalla y diploma, el Premio de la Asociación Española de Pintores y Escultores y, dentro del apartado para niños, tres premios en la categoría de nueve años y otros tres de 10 a 15 años (dos premios y una mención especial en cada categoría).