El fútbol es un lugar idóneo para crear historias. Y, entre su enorme amalgama de relatos, los de maldiciones y maleficios cobran especial relevancia. Están los que se ciernen sobre los equipos, como el del Benfica a nivel europeo desde la salida de Bela Guttmann o como el que llevó a apodar al Bayer Leverkusen como 'neverkusen', encasillado siempre en una eterna segunda posición que esta temporada parece tambalearse. Pero los caprichos del balón también dejan lugar a las leyendas de jugadores portadores de mala suerte. Lo fue Michael Ballack, jugador, precisamente, del Leverkusen, y ahora, ese sambenito parece recaer sobre Harry Kane. El inglés abandonó el Tottenham Hotspur el pasado verano para vestir la camiseta de un Bayern siempre devorador de títulos, tanto en casa como en el Viejo Continente. Pero ha sido llegar el delantero y experimentar el 'ogro' bávaro un descenso a los infiernos para el que los aficionados tienen un atajo claro para explicarlo: la llegada del 'nueve'.
Dan completamente igual los 38 goles que ostenta después de 37 partidos disputados esta temporada. También las 12 asistencias repartidas a sus compañeros entre todas las competiciones. Igual da que haya anotado cuatro 'hat-trick' y otros tantos dobletes la campaña de su debut en la Bundesliga y que sea uno de los atacantes más reverenciados a nivel mundial. Kane es portador de la mala fortuna.
Y hay argumentos para dejarse llevar por lo esotérico. Once años llevaba el conjunto de Múnich dominando el campeonato doméstico con mano de hierro. Desde que el Borussia Dortmund de Jürgen Klopp se viniera abajo, el Bayern no ha parado de acumular trofeos sin parar en su país. Daba lo mismo si al parón invernal de Alemania llegaba el equipo fuera del primer puesto o con un claro rival por el trono, el acelerón bávaro en el tercio final de la temporada no podía ser igualado nunca por nadie.
Pues todo hace indicar que más de una década después cederá su corona a aquel contendiente que, hasta la fecha, no sabe lo que es probar las mieles del éxito en la Bundesliga y que se ha quedado a un paso de la gloria hasta en cinco ocasiones.
Son muchas 'casualidades', pero resulta difícil pensar que un jugador que ha marcado más tantos que partidos disputados sea gafe. Los datos hablan de un futbolista indomable en el área contraria, como sucedió durante años en Londres, con la camiseta de los 'spurs'. De hecho, hablamos del, por el momento, actual Bota de Oro del continente, muy por encima en puntos de Kylian Mbappé.
Kane se ha encontrado en el Allianz un proyecto empobrecido y que, con Thomas Tuchel a los mandos, ha terminado por naufragar al observar que con el apretón habitual no le daba para doblegar a un Leverkusen de Xabi Alonso que está camino de hacer historia.
El inglés llegó en el momento menos indicado para levantar títulos, todos los astros se alinearon para hacer de él una suerte de Fernando Alonso, estableciendo un símil con la Fórmula Uno. Pero, como en el caso del asturiano, su rendimiento no rema en favor de la deriva de un conjunto llamado a arrasar en la Bundesliga y en Europa, sino todo lo contrario.
Este verano el Bayern afrontará una revolución necesaria en muchos de sus estamentos. Seguir contando con Harry Kane será una decisión acertada para que los Jamal Musiala, Leroy Sané y compañía tengan una referencia a la cual nutrir y sacar partido. Además, el ariete tendrá otra oportunidad de tocar un metal tras años de sinsabores. Inglaterra se presenta como una de las favoritas al título en la próxima Eurocopa. La actual subcampeona tratará de levantar su primer entorchado continental tras quedarse a un penalti de hacerlo en 2021... con Kane sobre el campo.