Los barrios  de la capital abulense cuentan para recoger las inquietudes de sus habitantes con una herramienta no sólo importante sino también, en ocasiones, imprescindible y más en una ciudad pequeña como es la nuestra. Son esas asociaciones de vecinos que suman 15 en la ciudad y que se aglutinan en la Federación de Asociaciones de Vecinos de Ávila, la FAVA, con cuyo portavoz hablamos 'hoy', con Marco Antonio Serrano, para que nos explique cuál es la realidad en la que viven, su estado de salud, las demandas atendidas por los dirigentes municipales en los últimos tiempos y las que están a la espera de respuesta, algunas de ellas «históricas», las califica el propio Serrano. 

No sólo eso también hablamos de su actividad, sobre todo en materia cultural y de fiestas en la que mucho tienen que decir dado que llenan no pocos vacíos a lo largo del año y en la que está cada vez más claro que confían los vecinos. Para muestra un botón: en 2023 e impulsado por el fin de la pandemia el asociacionismo ha ido a más y las familias que aglutina la FAVAsuman ya cerca de las 10.000.  

La FAVA«está bien, goza de buena salud, pero seguimos buscando presidente», cuenta Marco A.Serrano. Eso no significa ni mucho menos que esté descabezada porque la actividad está claro que continúa y ahora con la llegada del verano se notará aún más pues empieza el despliegue de semanas culturales y fiestas de los barrios con las que atender demandas vecinales. 

«Nuestra labor es de gestión y representación que es la que hacemos constantemente con las asociaciones federadas», cuenta Serrano.

«Hemos batido en general récord de familias asociadas en todas las asociaciones y eso es importante porque con la pandemia tuvimos numerosas bajas». 

Es un fuerte espaldarazo a la gestión y al buen trabajo que hacen continuamente las asociaciones de vecinos sobre todo gracias a las numerosas actividades que plantean, relata el portavoz de la FAVA. Y es que entiende que desde las asociaciones «nos vemos obligados a suplir la falta de actividades de aquellos que las tendrían que hacer, ayuntamientos o a quien corresponda». «Son nuestras actividades las que atraen al personal y les animan a asociarse». Animan, tiene claro a que «la gente salga de casa y se pase un buen rato además de estar en contacto con otros vecinos».

Tras dos años malos con la pandemia, 2022 y 2023 marcan la recuperación y la dinamización de las asociaciones que siguen teniendo diferentes demandas «lo que FAVAnecesita es lo mismo que el resto de las asociaciones de vecinos, sobre todo porque los costes de suministros están mermando los fondos que recibimos del Ayuntamiento, seguimos necesitando un mejor manteminiento de las sedes de las asociaciones pues había una partida presupuestaria para ello al final del año pasado y no se ha ejecutado nunca al 100% y en el caso de hacerlo incluso han tenido problemas, caso de la de la Encarnación que no podían acceder a la sede después de meses desde que acabó la obra». 

Más peticiones de siempre y que vuelven a estas páginas pasa por la«mayor agilidad a la hora de justificar el convenio FAVA-Ayuntamiento», tardan demasiado tiempo, estiman «en decirnos si las facturas están bien o mal». 

Es «imprescindible que el Ayuntamiento, lo gobierne quien lo gobierne, haga de una vez por todas la cesión legal de las sedes a las asociaciones, muchas históricamente la tienen pero no hay un documento que lo justifique. Es grave y se lo hemos pedido a todos los partidos políticos en campaña, a los que están y de cara a los que vengan se lo repetiremos para que lo solucionen porque es sencillo pero falta voluntad».

Las demandas recuerdan que son siempre las mismas y pasan por los arreglos de calles, más espacios verdes, más parques específicos para los perros, mejora de los polígonos industriales, más implicación con el comercio de proximidad, mejoras en la red de alcantarillado de la ciudad. Al final son continuas, se repiten en el tiempo y a veces «ni siquiera es que vaya por barrios sino que se repite la situación en el mismo». En este sentido «no echamos culpas a nadie porque viene de lejos».

Por supuesto que ha habido avances para los barrios, ahora hay más parques caninos, se ha repuesto el mobiliario de los parques infantiles, pero se echan de menos más acciones, como por ejemplo el hecho de que las fiestas se concentran más en el casco histórico y se estima que deben salir más a los barrios.También ahí se han dado pasos adelante pero se precisan más. 

El transporte preocupa porque «con las frecuencias actuales de bus urbano hay veces que tardas hasta una hora en que venga el autobús, dependiendo por ejemplo de si es fin de semana». No ven lógico continúa el portavoz de la FAVA que se lance un nuevo PMUS sin dar antes una solución de movilidad. «Están haciendo las cosas sin consultar, sin dar ningún tipo de participación ni asociaciones de vecinos ni a FAVA». El plan que siguen -apunta « es el de una empresa», asegura porque «fue en un pliego como se planteó y no ofrece movilidad.Quitas sitios de aparcamiento, pero no das una solución para dejar los coches y estos todavía no vuelan y hay que buscarles sitio para estacionar». En este sentido «estamos empezando la casa por el tejado y lo que necesitamos es un plan de movilidad aumentando frecuencias en el bus urbano y en todo el entramado de transporte».

Más asuntos pasan por la petición de la bajada del IBI, de la tasa de basuras, de agua, más autobuses para los barrios anexionados y eso que se ha estrenado en esta legislatura un servicio de transporte a la demanda, por así decirlo... Y sigue con la necesidad de «eliminar tasa por uso de materiales y una partida para arreglos de asociaciones de vecinos constante y ejecutada». Todo eso  es lo que sigue demandando desde la FAVA.