Este domingo 6 de noviembre se celebra el Día de la Iglesia Diocesana y lo hará bajo el lema 'Gracias por tanto' de ahí que la rueda de prensa para presentar esta jornada fuera precisamente un agradecimiento a quienes, entre otras cosas mantienen «las parroquias vivas y apasionadas». 

El administrador apostólico de la diócesis  de Ávila,Jesús García Burillo, quiso personificar este jueves  su agradecimiento en diferentes colaboradores que tiene en su día a día una iglesia de Ávila a la que se encargan, dijo, de humanizar.  Se refería a quienes trabajan en Cáritas, a los socios de Manos Unidas, a los catequistas, a los sacerdotes, a los visitadores de enfermos, a los misioneros que Ávila tiene repartidos por el mundo... Y tantos y tantos otros que han hecho posible unas cifras que permiten, entre otras cosas, echar una mano a quienes más los necesitan. Unas cifras que son elevadas y que a buen seguro irán a más. 

En un principio, desde la diócesis la intención no era dar esos datos pero al final la realidad es la que es y situaciones como la guerra en Ucrania y la crisis energética y económica hacen necesario que alguien ayude a quien lo necesita. Hasta septiembre de 2022, la ayuda que dispensa Cáritas ha crecido un 40% respecto a 2021 en los bonos para la adquisición de alimentos, apuntaba la directora de comunicación de la diócesis Auxi Rueda. Y como decíamos, las previsiones no son buenas para acabar el año en curso.

La revelación de ese incremento de algún modo no es más que la punta del iceberg pues desde la diócesis se dispensan más acciones caritativas y asistenciales y las previsiones son las de ir a más.De momento en lo que respecta al 2021 hay que destacar que en la diócesis se ha atendido a más de 4.700 personas. Por un lado los dos centros para promover el trabajo con el que cuenta la iglesia atendió en 2021 a 512 personas; mientras que los centros para mitigar la pobreza hicieron lo propio con 2.175 personas;  otras 866 personas acudieron para su atención en centros de menores y jóvenes y otros centros para la tutela de la infancia. Casi medio millar estuvieron en centros de rehabilitación para drogodependientes y 660 más en casas para ancianos, enfermos crónicos y personas con discapacidad. Hay además centros para la defensa de la vida y la familia que atendieron a otras 15 personas.

Al margen de esto, la iglesia es mucho más: actividad celebrativa, pastoral, educativa y evangelizadora. Respecto a la primera aquí sí la actividad fue a menos en 2021, algo lógico pues hablamos de un año de restricciones por la covid. Así, en Ávila se han celebrado 645 bautizos, 529 confirmaciones, 781 primeras comuniones o 138 matrimonios. Respecto a estas últimas hay que decir que son pocas pero es que «muchas se han pospuesto a este 2022».

La labor pastoral está en manos de cerca de 200 sacerdotes, de los que 141 están en activo y se encargan de nada menos que 266 parroquias. En Ávila hay 470 religiosos y religiosas de los que 218 son de clausura «un importante capital humano». 416 catequistas, siete seminaristas, un diácono permanente, 15 monasterios 41 BIC. 

Así iba desgranando Rueda las cifras de un 2021 en la que también quiso destacar que la iglesia en Ávila es, tras la Administración Pública, una «empresa», entre comillas efectivamente, de las más grandes pues cuenta con 616 personas trabajando como personal docente a los que se suman otros 235, como personal no docente y que se reparten por 12 centros educativos católicos de los que 10 son concertados y tres de titularidad de la iglesia. En ellos se forman 10.000 alumnos, si bien en Ávila son 12.000 los alumnos de religión que imparten 58 profesores que se encargan de esa materia.

Además a lo largo de 2021 se han realizado 23 proyectos de construcción y rehabilitación de edificios religiosos.