En plena calle Burgohondo, en la zona sur de la ciudad lleva el bar Los Maños siendo testigo de la vida diaria nada menos que 40 años. De hecho 41 serán los que cumpla el próximo enero. Allá por el año 1983 Miguel Ángel Jiménez y su hermano Chuchi iniciaron la andadura que ahora continúa el primero de ellos con su esposa, Belén Martín, quien llegó al relevo de Chuchi hace la friolera de 18 años. Ellos han dado forma a un bar ya mítico que siempre ha recibido el respaldo de sus vecinos, especialmente los de la zona sur pero desde luego que de otros puntos de la ciudad también.Se han ganado la clientela a base de esfuerzo, buen sabor y de esa capacidad de saber adecuarse a los nuevos tiempos.
Es uno de los bares más madrugadores de la ciudad, abre poco después de las seis de la mañana y las delicias de la cocina empiezan adesfilar a partir de las 7,30 «que es cuando nos traen el pan». Y es que si algo trabajan bien son los desayunos. Son muchos los trabajadores que paran allí para coger fuerzas con las que afrontar la jornada. La gran mayoría acompaña el café de bocatines y de pinchos salados, que los hay por decenas; y de tostadas, dulces o saladas .Lo que pidan, se les pondrá, y si es para llevar, también. La bollería «que horneamos por la mañana» es otro de sus fuertes y además «los viernes tenemos chocolate con churros y porras». Sobre el calientatapas, un poco de todo y para todos los gustos: las clásicas patatas al ajillo que es uno de los aperitivos que ha sobrevivido década a década desde los inicios del bar Los Maños. «Junto a ellas, oreja guisada, mollejas, huevos rotos, lomitos empanados, choricitos...» Nos detalla con entusiasmo Belén. Luego ya en la zona de los fríos, también hay parte casera, por ejemplo esos boquerones en vinagre a los que siempre da el toque Miguel Ángel, cuenta su esposa a Diario de Ávila. Él lleva en el local desde los inicios, en 1983, y en hostelería, muchos más. Su andadura comenzó cuando cumplió los 15 años, aunque empezó en Madrid. Allí 'emigró' desde Blacha, su pueblo. Y es que a pesar de que su local se llama Los Maños, la familia es de «Ávila, Ávila», bueno de la zona del Amblés más bien porque Belén también es de por allí, de Muñana concretamente. En definitiva abulenses de pro y lo que eso significa en lo que al tapeo se refiere porque si de algo sabemos en esta tierra es de tapear.
Así pues ¿Por qué no empezar en este local tan madrugador con un reparador desayuno? Por cierto ¿y por qué Los Maños? Fácil. Porque antes que ellos el bar lo llevaba otra persona y éste era de Zaragoza. En principio pensaron en cambiarlo, pero al final se quedó así y, lógicamente, así seguirá unos años más pues a la pareja anfitriona, si todo va como hasta ahora, les queda cuerda para rato. Ella tiene 58; él, 62. Larga vida a Los Maños pues.
DIRECCIÓN: Calle Burgohondo, 15
HORARIO: De 6,15 a 22 horas (aprox) de lunes a sábado.Domingos cierra.
ESPECIALIDAD: Desayunos, con bollería recién horneada o salados a base de bocatines y diferentes tostadas, pinchos variados caseros en caliente y frío. Comidas y cenas por encargo y también para llevar.