A principios de noviembre los abulenses se sorprendían con la caída de un merlón de la Muralla, en la zona del paseo del Rastro. Una situación que obligó a trabajos de emergencia y que todavía está pendiente de la actuación por parte del Ministerio de Cultura y Deporte.

Pero, según ha podido saber Diario de Ávila, no será la única intervención que se llevará a cabo puesto que, según informan desde el propio Ministerio, se está estudiando en estos momentos, a través del Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE), «una actuación para intervenir en varios puntos de la Muralla de Ávila entre los que se encuentra el lienzo ubicado entre los cubos 82 y 83». Se trata de un lienzo próximo a la puerta del Alcázar, detrás de la imagen de La Santa.

Señalan desde el Ministerio que esta zona fue objeto en el mes de noviembre «de prospección con georradar para determinar las causas del abombamiento que presenta en su base». Es por ello que anuncian que «en próximas fechas se dará inicio a los trámites necesarios para poder comenzar la intervención».

Este tema también se recogió  en un acta de una Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Ávila donde se habla de «un informe técnico elaborado por técnicas municipales en el mes de octubre, sobre el estado del Lienzo 82-83 de la Muralla, que concluye con la necesidad de una actuación inmediata para frenar su deterioro y evitar el posible colapso del lienzo». 

Juan Carlos Corbacho, teniente de alcalde de Urbanismo, Patrimonio y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ávila, explica que el informe que se realizó era por los daños que se habían detectado en la zona de la Muralla, tras la estatua de La Santa, y que es donde se va a intervenir. Ya habían advertido problemas en esta zona y fue por eso que se encargó el trabajo «a nivel técnico» a una arquitecta municipal. El informe, señala, se llevó personalmente al Ministerio de Cultura y, en base a él, se hizo una visita por técnicos del propio Ministerio «que confirmaron en situ que había que actuar».

Fue en este mismo momento cuando se aprovechó para que vieran el interior del Arco del Alcárzar, donde también había una serie de daños en el interior del arco. En concreto, habla el representante municipal de que «las piedras del arco están dañadas por roces de vehículos», lo que, al comprobarse, se decidió incluir también como actuación.

Esto confirma lo que señalaba el propio Ministerio de Cultura al hablar de actuaciones en «varios puntos» de la Muralla. Según anuncian desde el Ayuntamiento, así sucederá en el lienzo donde está el abombamiento, el interior del Arco del Alcázar y en el lugar del derrumbe del pasado mes de noviembre, donde, recuerda Corbacho, «la caída de un muro arrastró merlones» de la Muralla. Lo que se hará en este lugar es «rehacer el muro», aunque no sea un elemento propio de la Muralla, aunque será «a altura más baja», y se reconstruirán los merlones afectados.

Señala el teniente de alcalde que «en la Muralla hay que actuar de contiuo, siempre tiene algo que hacer» porque «si no se actuara al final los problemas se harían más graves». Aún así no cree que se pueda decir que el estado del monumento «sea realmente malo».

lo sucedido en noviembre. Entre las actuaciones que están pendientes de llegar al principal monumento de la ciudad está la prevista en la zona donde se produjo el derrumbamiento el pasado mes de noviembre.

En este caso, lo último que dijo el Ministerio es que se estaba evaluando el alcance de las obras necesarias de reparación, es decir, se está haciendo el trabajo técnico para evaluar las patologías en la Muralla tras el desprendimiento y proponer una posible intervención. Esta actuación depende del Ministerio puesto que es el titular del monumento y será una de las previstas en la Muralla, dentro de los puntos donde se intervendrá.

Por lo tanto, falta por conocer cuál será el planteamiento definitivo de Cultura para recuperar una zona en la que se produjo el derrumbe, más allá de lo que indica el Ayuntamiento, institución que ya tuvo que realizar obras de emergencia para evitar que hubiera más desprendimientos y que produjeran más daños en el monumento o en las personas.

Una vez realizadas esas obras de emergencia la actuación quedó en manos del Ministerio quien todavía no ha comunicado públicamente las actuaciones que se realizarán y que, probablemente, tengan que pasar por Consejo de Ministros antes de licitar las obras.

Fue en la tarde del 3 de noviembre cuando se produjo el derrumbe en la Muralla, con daños en parte de los merlones situados entre los cubos 77 y 78, en la zona del paseo del Rastro, sin que hubiera daños personales. Posteriormente se conoció que los daños afectaban al menos dos de los merlones entre esos cubos 77 y 78.  Lo que había caído era un muro anexo a la Muralla que no formaba como tal parte de este monumento (que parece ser que ahora se reconstruirá a menor altura) pero que sí provocó daños en él. Fue un viandante el que dio la voz de alarma al ver lo que se desprendía una parte de un merlón, lo que fue consecuencia del empuje del muro que había caído y provocó los daños. El muro se derrumbó, golpeó contra una almena de la Muralla y ésta cayó a la vía pública.