El Real Ávila se enreda en el Bierzo

Área 11
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Atlético Bembibre
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Real Ávila
Finalizado
Empate sin goles ante el Atlético Bembibre en un partido en el que los encarnados fueron los que más propusieron aunque sin acierto en el remate

Los jugadores del Real Ávila y Bembibre se saludan al inicio del partido. - Foto: @AtcoBembibre

Atlético Bembibre.

Ivanildo; Espinosa, Fath, Yaya, Badia, Alderte, Quintero, Contreras (Manu García, 71´), Espi (Riverón, 85´), Álex Martínez y Monroy (Valle, 63´).

Real Ávila.

Ñete; Pascual, Diego Rubio, Llorian, Sito Cruz; Tena, David Sanz (Dani Marqués, 75´); Javi de Mesa (Peñalvo, 88´), Toper (Velasco, 60´), Adeva e Ivi.

Árbitro.

Domíguez Zapatero.

Mostró cartulinas amarillas a los locales Monroy, Espi y Badia; y a los encarnados Diego Rubio, Toper, Velasco, Adeva y Ñete.

Goles.

Sin goles

Incidencias.

Encuentro correspondiente a la jornada 11ª de Tercera RFEF- Grupo VIII disputado en La Devesa   

 

El Real Ávila CF se enredó ante un rocoso Atlético Bembibre que ni siquiera lanzó a puerta en todo el partido y pese a que fue el equipo que más propuso y el que se acercó a la portería rival, apenas generó nada. Le faltó la pegada necesaria para traducir en gol sus fases de dominio y terminó dando por bueno el empate sin goles fuera de casa.

El duelo comenzó con los abulenses enviando el cuero al área oponente de manera directa y con un David Sanz muy activo aunque sin precisión en un par de primeros acercamientos. Los de Borja Rubiato buscaban hacerse con el control del encuentro y jugar en campo contrario cuanto antes, por lo que ante la dura presión visitante al Atlético Bembibre no le quedó más remedio que recurrir al patadón para sacudirse el acoso inicial. Al poco se vería el primer remate a puerta, que no a palos, con un cabezazo de Ivi. Una jugada que dio paso a una fase más equilibrada por mucho que el portero Ivanildo fuera el que más pelota tocara en el cuadro berciano. Y es que superado el cuarto de hora el Real Ávila había conseguido sus objetivos iniciales, pues tenía el dominio territorial y mandaba en el centro del campo gracias a la posesión, pero ahora le faltaba mayor mordiente arriba y finalizar mejor sus acometidas ya que las ocasiones escaseaban. Aunque en el 18' tuvo una buena cuando Toper conseguía ganar un balón dividido para ceder a Tena, que la metía en el área y el cabezazo de Ivi se marcha arriba cerca de la escuadra.Cinco minutos más tarde tendrían la suya los leoneses cuando Monroy le robaba la cartera a David Sanz muy cerca del área y Diego Rubio lo derriba para ver una amarilla y una falta muy peligrosa.El lanzamiento de Gabri se marchó fuera por poco. En todo caso muy poco bagaje ofensivo para una primera parte que se fue ajustando cada vez más hasta cerrarse por completo.

En el reinicio y bajo una fuerte lluvia el Real Ávila volvió a apretar duro como ya había hecho en el final del primer periodo, donde Adeva había estado muy activo, y en cuestión de segundos empotró a los bercianos en su área dando mucho trabajo a Ivanildo con constantes acciones a pelota parada. La mejor la tuvo cuando Javi de Mesa, primero, y David Sanz, después, tuvieron la oportunidad de batir a Ivanildo desde cerca, pero el punto de mira seguía desviado. Superada la hora de juego llegaron los primeros cambios de ambos técnicos. Y es que algo había cambiado, porque el Real Ávila no encontraba huecos claros ni precisión en el remate, mientras que el Atlético Bembibre comenzaba a estirarse algo más. Estos primeros cambios y los que vendrían posteriormente no hicieron sino acrecentar el cambio de dinámica, porque de nuevo el enfrentamiento atravesaba por una fase de mucha mayor igualdad y eso no era buena noticia para un Real Ávila sin tanto fuelle ya sobre un césped donde ya comenzaban a aparecer numerosas zonas encharcadas.

Se entró en el último cuarto de hora con el resultado en el aire y sin dominio de nadie, con cada vez más contactos físicos y las consiguientes interrupciones. Y ya casi nada sucedería porque la única importante sería local en el descuento, cuando entre el mal pase de Sito y el agua que frenó el cuero obligaron a Ñete a cogerla con las manos ante la presencia de dos atacantes. Un libre indirecto en el área chica e inmejorable donde los bercianos ni siquiera fueron capaces de chutar a palos.