La sensación es que este verano no fue ni parecido a los anteriores en lo que al número de los incendios forestales, su impacto y sus consecuencias en la provincia de Ávila, y ahora los datos lo corroboran. El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, compareció ante la correspondiente comisión de las Cortes de Castilla y León para ofrecer el balance de la campaña de lucha contra incendios forestales correspondiente al año 2023, la cual deja un descenso del 83% en cuanto a las hectáreas forestales quemadas en Castilla y León respecto a la media del decenio, mientras que el número de incendios se redujo un 34%. 

En Ávila también se dio esta tendencia y, frente a los años anteriores, marcados por campañas especialmente virulentas en cuanto a la proliferación y alcance de los incendios, con especial referencia a los fuegos de la sierra de la Paramera y El Hoyo de Pinares, en este 2023 se registran un centenar de incendios y algo más de medio millar de hectáreas calcinadas. En concreto se habla de 101 incendios (84 conatos y 17 incendios) y 560 hectáreas quemadas en Ávila. En relación al año anterior se aprecia un importante descenso que superó el 90% en cuanto a la superficie afectada y el 19% en el número de fuegos, no en vano en 2022 se habían contabilizado 125 incendios que calcinaron casi 7.000 hectáreas, la mayoría de superficie forestal.

Como es habitual, la parte oeste de la Comunidad concentra la mayor incidencia de incendios forestales, aunque también destacan las cifras de Ávila y Burgos. En toda la comunidad se registraron 923 incendios, la mayoría de ellos quedándose en conatos y con una superficie forestal quemada de 3.371 hectáreas, un 85 % menos que el año pasado.

Aún así, para la Junta los números resaltan la necesidad de continuar concienciando a la población sobre la importancia de extremar precauciones, evitar imprudencias y observar las normas establecidas, así como de colaborar en las investigaciones en la medida de lo posible.

A modo de conclusión se resalta que la campaña de 2023 destacó por su excepcionalidad, con resultados positivos atribuidos a «condiciones meteorológicas favorables, la responsabilidad de la población y la eficacia del operativo». En este sentido, el consejero agradeció el trabajo del personal y resaltó la importancia de mantener la estrategia integral para preservar la biodiversidad en Castilla y León.