José Pulido

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José Pulido


Centenario

01/04/2023

Ha querido la casualidad que la publicación de este artículo coincida con el acto de celebración del centenario del Círculo Candeledano. Cien años de su fundación en el ya lejano abril de 1923. Estos Círculos, los populares casinos, son instituciones imprescindibles para comprender la vida social, cultural y hasta política de España durante buena parte del siglo XIX y XX. Eran lugares de ocio, de diversión, de encuentro, que se multiplicaron por las ciudades y pueblos de «provincias», ese nebuloso término geográfico que denominaba a todo lo que se situara más allá de los límites de Madrid, la Villa y Corte, donde se centralizaba buena parte del imaginario de la vida nacional, aunque, por supuesto, había –y mucha– vida más allá.
Los Círculos o Casinos surgieron para dar respuesta a la necesidad tan española de disponer de lugares de diversión, de juegos, de tertulia, de contacto entre iguales. Participar de un Círculo era participar de un determinado estatus, una actividad, una dinámica de relaciones sociales en tiempos en los que no existían muchas otras formas de encuentro. Con todas sus virtudes y defectos se convirtieron en espacios necesarios donde se articulaba la convivencia.  Sus distintas denominaciones nos dan pistas del origen y el ámbito en el que se formaron: Círculo Católico, Obrero, de Labradores etc.
Su éxito los convirtió en escenarios y casi personajes de nuestra literatura, de nuestro teatro, símbolos imprescindibles para entender a muchas generaciones de españoles. A todos nos viene a la memoria los versos de Antonio Machado, cuando retrataba a aquel «hombre del casino provinciano», como ejemplo de una España agonizante que los escritores de la Generación del 98 querían regenerar.
El Circulo Candeledano celebra hoy su centenario. Surgió en una década difícil y a la vez llena de esperanza, como fueron los locos años 20 del siglo XX. En ese año se fundó una mítica compañía cinematográfica, la Warner Bross Pictures. Se inauguró el estadio de futbol de Wembley en Londres y España se preparaba para las elecciones generales del 29 de abril. No están tan lejos de nosotros. Nos suena todo ¿verdad?. Seguro que se fundó con la ilusión de los nuevos proyectos que prometían prosperidad y optimismo. 
Muchas generaciones de candeledanos han disfrutado de él desde entonces. Atravesó momentos de esplendor y tiempos difíciles, a punto estuvo incluso de la desaparición. Ha sido y continúa siendo protagonista de la vida cotidiana de la localidad, de sus fiestas, promotor de actividades culturales, de conferencias, de actuaciones musicales. Un cómodo espacio para disfrutar de la compañía de los amigos o jugar una buena partida de cartas o dominó.
Es como un viejo compañero al que siempre podemos acudir cuando buscamos el calor de una buena compañía. El que nunca se marcha y acoge a los que vuelven con la cordialidad de siempre. También es un superviviente, un testigo del pasado, un punto de referencia que guarda la memoria de todos los que compartieron esta comunidad, de los que fueron en otro tiempo y los que hoy son y se sienten parte del pueblo de Candeleda.
El Círculo Candeledano cumple cien años y conmemora esta redonda cifra con un programa que comienza con un acto institucional, con la presencia de las autoridades y de los responsables de las distintas Juntas Directivas que rigieron sus destinos durante su última etapa. Se han programado además numerosas actividades a lo largo de todo el año para que este 2023 se recuerde y se celebre, por si lo habíamos olvidado, que este pueblo, Candeleda, tiene una entidad centenaria, lo que ya supone en sí un mérito. Una institución con cien años a sus espaldas que tiene que afrontar cada día el reto de seguir adelante. En un momento histórico complicado en el que parece que nos estamos jugando el futuro del mundo rural, el Círculo, es un ejemplo de tenacidad. Su éxito o su fracaso repercutirá también en la lucha por mantener vivos nuestros pueblos. Debe recordarles y recordarnos a todos que tienen un gran pasado. Y que ese pasado es un estímulo más en el reto de ganarse el futuro.