El Círculo Candeledano, o el Casino, como también se le conoce, cumple este año un siglo de vida. Fue el 1 de abril de 1923 cuando 38 candeledanos, entre ellos terratenientes, ganaderos, agricultores y hasta un farmacéutico, constituyeron esta asociación con el objetivo de compartir sus inquietudes culturales, políticas o sociales. También con el de hacer negocios, teniendo en cuenta que Candeleda era un cruce de caminos y que en esta localidad se reunían gentes de varios pueblos de la zona.
La primera sede del Círculo Candeledano estuvo en la calle La Amargura, que va de la Iglesia a la Plaza, y el primer presidente fue Luciano Pallero. Desde entonces han sido decenas los hombres que han dirigido el camino de esta asociación privada sin ánimo de lucro que ha pervivido hasta nuestros días a pesar de los momentos convulsos y de las dificultades atravesadas en ciertas épocas. Siempre hombres. Hasta este año del centenario en el que por primera vez una mujer, María Candelas Moreno Gómez, se ha puesto al frente del Casino de Candeleda. Y aunque es cierto que en sus estatutos el Círculo Candeledano nunca estuvo restringido a la participación de mujeres también lo es que durante décadas solo hubo socios masculinos. Es más, hasta los años 90 del siglo pasado no se asociaron las primeras mujeres, siendo Mari Luz Castro la primera fémina en formar parte de una Junta Directiva. «Desde entonces la presencia de mujeres se normalizó», recuerda Moreno Gómez al hablar de una asociación que actualmente cuenta con 125 socios y que llegó a tener 180.
Desde sus orígenes el Círculo Candeledano nació como sociedad privada sin ánimo de lucro y de carácter cultural, turístico y recreativo. Y es que no solo fue objetivo de los fundadores propiciar un foro de encuentro para hablar de cultura, sociedad y política sino también dar a conocer Candeleda y sobre todo la Sierra de Gredos, lo que en aquella época no dejaba de ser un pensamiento bastante progresista. Es más, uno de los objetivos de esta asociación desde su fundación, y que se mantiene tal cual, era el de promover iniciativas y estudios destinados a la conservación de la naturaleza mediante un uso más racional de los recursos naturales.
También objetivos desde sus inicios de esta sociedad son los de proporcionar instrucción y recreo a sus socios, además de fomentar el turismo de Candeleda en relación con la Sierra de Gredos, así como promover el desarrollo de la agricultura, la ganadería y la industria y trabajar por el mantenimiento de las tradiciones culturales colaborando para ello con instituciones públicas o privadas.
Gracias a los socios, y a las aportaciones de sus obligaciones, pasado algún tiempo el Círculo Candeledano adquirió un solar en la avenida Ramón y Cajal, emplazamiento que entonces se antojaba a las afueras del casco urbano. Allí se levantó la nueva sede del Casino de Candeleda, que se ha mantenido hasta la actualidad aunque también ha sido objeto de reformas durante este tiempo. La más importante, recuerda la presidenta, tuvo lugar en 1987 cuando se levantó una nueva planta, suprimiendo la terraza. «Fue como una refundación», apunta Moreno González, al hablar de ese momento en el que el Círculo Candeledano modernizó sus instalaciones dotándose también de dos locales comerciales en la planta baja que actualmente están alquilados contribuyendo a aportar ingresos a esta asociación.
Pero si hay un momento complicado en la historia del Círculo Candeledano, y también de nuestro país, fue el de la Guerra Civil y el de la postguerra. Y es que si bien es cierto que la actividad nunca se interrumpió y que el Casino no llegó a cerrar su puertas, también lo es que en los años 40 la autoridad civil tuteló esta sociedad que se pasó a llamar Sindicato de Iniciativas Turísticas Círculo Candeledano, nombre que mantuvo hasta mediados del siglo pasado cuando nuevamente recuperó su condición de asociación cultural, turística y recreativa.
Durante estos cien años de vida el Casino de Candeleda ha sido uno de los motores culturales de esta localidad. De hecho, en sus bajos y durante una época la biblioteca municipal estuvo allí. Presentaciones literarias, conferencias, exposiciones, teatro, fiestas, concursos culturales, reuniones empresariales o bailes, porque también el Círculo Candeledano es un destacado espacio de ocio y recreo, se han desarrollado durante el último siglo en esta asociación donde, por ejemplo, nació el Concurso de Cante Flamenco de Candeleda, en la actualidad uno de los más prestigiosos de nuestro país y que más tarde pasó a organizar el Consistorio candeledano.
Y es que la cultura ha sido desde siempre uno de los pilares de esta sociedad que organiza anualmente un concurso de novela corta y que además mantiene colaboraciones con otras asociaciones como El Parnasillo Castellano o la Sociedad de Montañismo Peñalara, en este caso dentro de ese apoyo a la divulgación de la Sierra de Gredos. Una actividad que se intensificará a lo largo de este año con motivo de su centenario.