El pasado 8 de septiembre Marruecos sufrió un devastador terremoto de una magnitud de 6,8 grados en la escala Richter que afectó principalmente al sur del país y que dejó miles de muertos y heridos, así como importantísimos daños materiales. Es más, España fue el primer país en ofrecer su colaboración al Reino de Marruecos, y el primero al que se dirigió el país vecino en demanda de ayuda y cooperación. De hecho, el mismo sábado comenzaron a enviarse recursos, destacando un contingente de la UME, así como un equipo de Bomberos Unidos Sin Fronteras compuesto por profesionales voluntarios de todo el país. Días después, la tormenta Daniel arrasaba Libia, dejando 11.000 fallecidos, miles de desaparecidos y 34.000 desplazados, en lo que es una «catástrofe humanitaria a la que no es posible ser ajeno».
A raíz de ambas catástrofes, que demuestran que la naturaleza en su versión más extrema puede ser devastadora, la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), en representación de las Entidades Locales españolas, ha acordado una declaración institucional a la que este jueves se sumó el Ayuntamiento de Ávila. La teniente de alcalde de Servicios Sociales, Paloma del Nogal, fue la encargada de dar lectura a esta declaración en un acto celebrado a las puertas del Consistorio abulense al que se sumaron ediles de todos los grupos políticos con representación municipal, incluido el alcalde de la ciudad, Jesús Manuel Sánchez Cabrera.
Con este manifiesto Ávila trasladó toda su «solidaridad y afecto» a la población de ambos países, y a cuantas personas se han visto afectadas tanto por el seísmo de Marruecos como por las inundaciones de Libia. Una solidaridad que Del Nogal hizo extensiva a los naturales de esos países que viven en nuestra ciudad, donde están empadronadas 1.364 personas de origen marroquí, siendo de hecho la nacionalidad más numerosa de extranjeros en la ciudad por detrás las personas de origen rumano. Es más, desde el Ayuntamiento de Ávila apuntan que en la Oficina Municipal de Atención al Extranjero (OMAE), entre enero y agosto de este año se ha atendido a 154 personas de origen marroquí.
De Libia, sin embargo, no hay personas empadronadas en la capital abulense, según fuentes municipales.
a disposición del gobierno. También se sumó el Ayuntamiento de Ávila con este manifiesto a las iniciativas de ayuda a la población para paliar las terribles consecuencias del terremoto, a la vez que el Consistorio abulense se puso a disposición del Gobierno de España, con todos nuestros medios, para colaborar en cualquier tipo de actuación humanitaria, en el marco de los mecanismos de ayuda activados.