El repunte de enfermedades respiratorias como la gripe y el Covid-19 ha llevado al Ministerio de Sanidad ha publicar una serie de recomendaciones para prevenir el contagio, que no son nuevas sino las mismas que se dieron durante las oleadas de la pandemia pero que por relajación la población ha dejado de poner en práctica. Entre las medidas que el Ministerio de Sanidad recomienda ante el repunte de gripe y Covid-19, y que publicaba el pasado martes en redes sociales, se vuelve a insistir en el uso de mascarilla ante la presencia de síntomas respiratorios y también se recomienda el teletrabajo en el caso de encontrarse enfermo.
Entre estas recomendaciones también incluye el Ministerio de Sanidad la de la higiene de manos, así como cubrirse la nariz o boca al toser o estornudar. También el uso de pañuelos desechables para contener las gotitas respiratorias o las secreciones y que una vez usados los mismos se depositen cuanto antes en la bolsa de basura más cercana. Lavarse las manos con agua y jabón o limpiarlas con un gel con alcohol de forma regular y siempre después de tener contacto con secreciones respiratorias son otras de las recomendaciones lanzadas por Sanidad a modo de recuerdo para, dentro de lo posible, evitar el contagio por gripe y covid-19.
Sin embargo, no ha hecho falta que Sanidad vuelva a recomendar el uso de mascarillas para que la población vuelva a tapar sus bocas, especialmente en centros sanitarios y también ante la presencia de sintomatología respiratoria. Es más, mientras que hace unos meses el uso de mascarillas por parte de los abulenses se convirtió en algo casi anecdótico desde hace semanas la utilización de tapabocas se ha vuelto a generalizar. Así lo confirma Inés Barco, presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Ávila, que reconoce que durante las últimas semanas la venta de mascarillas se ha incrementado en las farmacias. Y es que si bien es cierto que los tapabocas nunca se han dejado de vender también lo es que desde el Puente de Diciembre han aumentado las ventas de este producto. También las de test de antígenos, reconoce, lo que evidencia que los abulenses vuelven a estar concienciados frente a los contagios.
El aumento tanto de las ventas de mascarillas como de test de antígenos tiene su lógica, como apunta también Barco, teniendo en cuenta que en las últimas semanas se ha producido un repunte de los contagios, tanto de gripe como de Covid-19, y también las fechas en las que nos encontramos. No en vano, las reuniones sociales y familiares, a las que ya casi nadie quiere renunciar, implican juntarnos con todo tipo de personas, también con colectivos vulnerables, lo que lleva a muchas personas a incrementar las medidas de prevención especialmente si se ha tenido sintomatología respiratoria o se ha estado en contacto con alguien contagiado.
«No se han dejado de vender, y hay gente que nunca ha dejado de usar mascarilla», reconoce Barco que apunta, eso sí, que desde principios del mes de diciembre las ventas de mascarillas, tanto quirúrgicas como FFTP2, ha repuntado, sin poder cuantificar en qué medida. No en vano, señala, las farmacias abulenses disponen de stock suficiente ya que muchas hicieron acopio en momentos en los que la demanda era mayor, por la obligación de su uso, lo que hace que exista disponibilidad y que no se pueda dar una situación de desabastecimiento como ocurrió en algún momento a principios de la pandemia de Covid-19.
un 50 por ciento más. Donde sí cuantifican cuánto ha aumentado la venta de mascarillas y test de antígenos es en cooperativas de distribución mayorista de medicamentos como Bidafarma donde confirman que desde noviembre ha habido un «aumento importante» de la demanda de test por parte de las farmacias abulenses. Pone como ejemplo Roberto Ortega, consejero territorial de esta cooperativa en Castilla y León, que mientras que en octubre Bidafarma distribuyó entre las farmacias abulenses a las que abastece (más de un centenar) 1.600 test de antígenos en diciembre se han repartido 3.100, lo que es un aumento del 50 por ciento.
«En noviembre ya se notó el salto cuantitativo», reconoce Ortega que apunta, eso sí, que aún así estamos muy lejos de las cifras de diciembre del año pasado, mes en el que esta cooperativa distribuyó entre las farmacias abulenses asociadas «6.000 test de antígenos», la mayoría mixtos. Y es que, apunta el consejero territorial de Bidafarma, aunque en el mercado existen dos tipos de test, los que detectan Covid-19 y mixtos, que también incluyen la detección de gripe, los segundos han ido ganando terreno a los primeros y son los que más se venden en la actualidad.
«Hay un repunte pero no estamos en la situación que estábamos en 2022», asegura Ortega que habla de un escenario sanitario «muy parecido» a los inviernos previos a la aparición del Covid-19. «El problema es que la sintomatología del catarro, sin ser la misma, a veces se confunde con la de gripe o covid», apunta este farmacéutico que reconoce que por ese motivo estas semanas también ha habido un repunte de demanda de antitérmicos, analgésicos y anticatarrales.
En cuanto a la demanda de mascarillas, apunta Ortega que aunque también es cierto que las farmacias han notado un incremento de la demanda en las últimas semanas las ventas en la actualidad nada tienen que ver con las de hace un año entre otras cosas porque entonces su uso aún era obligatorio en ciertos lugares. Así, en diciembre de 2022 Bidafarma distribuyó entre sus farmacias de Ávila 15.000 mascarillas mientras que a lo largo de este mes de diciembre se han distribuido entre dos y tres mil unidades.