El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Guirao, aseguró hoy en Valladolid que el “balance” desde la aprobación de la Constitución de 1978 es “excelente, viniendo de donde veníamos”, si bien reconoció que “hay que seguir trabajando por fortalecer el sector cultural y dar apoyo a los creadores”. Además, apuntó que “la cultura es nuestra mejor carta de presentación al mundo, la mejor herramienta para la cohesión social y territorial de España y una inagotable fuente de riqueza y prosperidad económica”.
Así lo expuso en la apertura de la jornada ‘40 años de Constitución, 40 años de cultura’, celebrada hoy en la Sala Delibes del Teatro Calderón, con la cual el Gobierno central abre una ronda de “debates, encuentros y reflexión sobre lo que la cultura ha supuesto para España y la Constitución ha aportado a la cultura”. Estos encuentros comenzaron hoy centrados en la figura de los gestores culturales (“surgidos y afianzados de manera clara en estos cuarenta años de democracia”, en palabras del ministro), y tendrán continuidad en Valencia el próximo 3 de diciembre con otra jornada dedicada a la evolución de las lenguas españolas a través de la poesía.
Para Guirao, la Constitución de 1978 “marcó un punto de inflexión para todos los ciudadanos españoles, incluidos creadores y artistas”, ya que “fue el germen de las industrias culturales y creativas españolas, que han crecido hasta convertirse en un sector importante, generador de empleo y desarrollo económico”. “Cuarenta años para la cultura son muy poco tiempo, pero la España actual nada tiene que ver con la España de 1978 gracias al poder transformador de la cultura”, reflexionó.
Según apuntó, España “pasó de la autarquía la posmodernidad sin haber vivido la modernidad, y eso es uno de los debes que aún tenemos” como sociedad, ya que “hay toda una generación que no pudo disfrutar de la creación cultural que se hacía en España y fuera de nuestras fronteras, entre 1939 y los años 70, y todo eso se nota en algunas de nuestras carencias”.
Tras recalcar que “la historia de la Constitución es una historia de éxitos”, pidió “no pensar que todo lo que se ha hecho es suficiente”. “Esta inflexión de 40 años debe servirnos para celebrar lo conseguido, reflexionar sobre nuestras carencias y trazar caminos de futuro, porque el futuro no puede llevarse a cabo en su totalidad sin una reflexión crítica”, afirmó.
Un espacio de convivencia
En la inauguración de la jornada también intervino la consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, María Josefa García Cirac, para quien “el hito más importante de la historia reciente de España es la promulgación de la Constitución de 1978”, donde “una de las grandes novedades y apuestas” fue la creación de las comunidades autónomas, que en su opinión “supuso un reto para las instituciones en la elaboración de políticas eficaces y eficientes para los ciudadanos”.
“Las comunidades tuvieron que buscar su lugar en el nuevo mapa constitucional”, aseguró antes de recordar que en la creación de la comunidad de Castilla y León, “desde el principio se apostó por la importancia de la vinculación histórica y cultural de nuestros territorios”, como recoge nuestro Estatuto de Autonomía, cuyo primer artículo señala que Castilla y León es una comunidad histórica y cultural, que tiene su origen en los reinos de León y de Castilla.
Según apuntó, el Gobierno regional ha trabajado desde entonces para “desarrollar un modelo de gestión cultural que permita compatibilizar grandes proyectos culturales con redes que doten de vida cultural los núcleos rurales”. Así, citó complejos como el Musac, el Museo Etnográfico, el Museo de la Siderurgia y de la Minería, el MEH, el Centro Cultural Miguel Delibes o el Centro de Creación Artística e Innovación en el Palacio de Quintanar en Segovia, y aludió a “modelos de gestión en red” que permiten alcanzar a todos los ciudadanos, mediante una “fluida colaboración con entidades locales y provinciales para hacer efectivo el acceso a la cultura”.
“Es preciso dar respuesta a la evolución del concepto de cultura como un derecho de valor social, porque es lo que permite hacer de la sociedad un auténtico espacio de convivencia”, señaló antes de explicar que, a su juicio, la cultura “es el vehículo perfecto para profundizar y poner en valor principios constitucionales como la tolerancia, la integración y la convivencia democrática”. “Podemos sentirnos orgullosos del camino recorrido. Estamos en la senda correcta”, concluyó.
Por otra parte, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, aseguró que España ha sufrido una “profunda y fecunda transformación” en las últimas cuatro décadas de la mano de la Constitución, un documento del cual “los españoles podemos sentirnos orgullosos”, ya que “fue una lección de generosidad”. “Hay quien reclama cambios, porque la sociedad española también ha cambiado y España debe abordar desafíos distintos, pero eso no quita para reconocer cuánto ha contribuido al éxito y el progreso de nuestro país”, valoró.
Puente quiso agradecer el trabajo de los políticos que, “tras la larga dictadura, supieron sortear las enormes dificultades a las que se enfrentaron, y antepusieron la concordia y el entendimiento a las diferencias ideológicas, para trazar la senda por la que hemos transitado en la etapa constitucional más larga de la historia de nuestro país”.