El Bono Concilia registra casi 12.000 solicitudes en un mes

SPC
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La consejera de Familia subraya la "buena acogida" de las políticas de conciliación del Plan Familias en su visita al CEIP 'La Charca' de Miranda de Ebro, junto a su homólogo de la Presidencia

El Bono Concilia registra casi 12.000 solicitudes en un mes - Foto: Ricardo Ordóñez ICAL

La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, destacó hoy en Miranda de Ebro (Burgos) la “buena acogida” que está teniendo en Castilla y León el Plan Familias y, en concreto, se refirió a la alta demanda de dos de sus recursos más destacados: el programa Conciliamos –que este verano ha sumado 10.454 participantes en los tres periodos en los que se ha ofertado– y el nuevo Bono Concilia –que acumula casi 12.000 solicitudes en un mes–.

La consejera aportó estos datos durante su visita a uno de los 117 centros de Castilla y León donde se está prestando el servicio Conciliamos en este periodo estival, el CEIP ‘La Charca’, junto a su homólogo de la Presidencia, Ángel Ibáñez. En este contexto, se comprometió a continuar impulsando las políticas de conciliación, con medidas que incidan en la corresponsabilidad de ambos progenitores en el cuidado y la atención de menores o personas dependientes y les permitan compaginar sus responsabilidades familiares con sus tareas profesionales.

“La protección y el bienestar de las familias constituyen una prioridad para el presidente Mañueco y desde su Gobierno ponemos todo nuestro empeño en procurarles un mejor futuro, con más oportunidades”, subrayó. Como ejemplo de estas políticas, la consejera se refirió a las mejoras introducidas en el programa Conciliamos desde el inicio de la legislatura o a la puesta en marcha de una nueva ayuda económica denominada Bono Concilia, dos recursos al servicio de las familias, adaptados a sus nuevas necesidades.

El programa Conciliamos ofrece atención lúdica a niños de entre 3 y 12 años –o hasta 14 se si trata de alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo– en periodos vacacionales –Carnaval, Pascua, verano y Navidad– mientras sus progenitores trabajan. En su desarrollo colaboran las entidades locales, que prestan las instalaciones y se encargan de su mantenimiento.

Edición especial de ‘Conciliamos 2030’ para familias vulnerables

La última innovación en la gestión de este recurso ha sido la puesta en marcha, este verano, de una edición especial de Conciliamos, que se ha pilotado de forma experimental en el colegio Cristóbal Colón, ubicado en el barrio de Pajarillos de Valladolid. El nuevo formato, denominado ‘Conciliamos 2030’, nace adaptado a las características de centros donde predomina el alumnado en situación de vulnerabilidad socioeducativa y existen necesidades especiales de inclusión social y laboral.

El objetivo de este programa especial es mejorar la calidad de vida de las personas que no disfrutan de las mismas oportunidades solo por razón de su pertenencia a minorías étnicas y culturales o por encontrarse en cualquier otra situación socio-familiar o de índole personal que incida en la igualdad.

Un total de 178 niños han participado en este proyecto, que la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades prevé extender a la totalidad de los 30 ‘centros 2030’ – llamados así por estar incluidos en el Programa 2030 de mejora socioeducativa– que lo soliciten, con la intención de contribuir a la integración social de estos menores y sus familias.

Como recordó la consejera, la Junta ha venido reforzando Conciliamos desde el inicio de la legislatura. En 2020, este recurso se amplió a todos los municipios de más de 3.000 habitantes que habían manifestado su interés en participar. Asimismo, y para favorecer la oferta de este servicio en el mundo rural, se redujo el número mínimo de menores requerido a 15 en localidades de más de 20.000 habitantes y a ocho en el supuesto de municipios de entre 20.000 y 3.000 habitantes.

Durante el verano de la emergencia sanitaria, el programa se reforzó con más días de servicio, más horario, más prestaciones (ofertando la posibilidad del comedor), más monitores (se pasó de 15 niños por instructor a nueve, más uno de refuerzo por cada centro y otro por cada tres grupos burbuja) y más limpieza para garantizar las condiciones higiénicas y cumplir con las recomendaciones sanitarias. Como consecuencia de lo anterior, la Junta duplicó la inversión en el programa Conciliamos en 2020, que pasó de 800.000 euros a 1,6 millones de euros.

“Aluvión de peticiones” de la nueva ayuda de 750 euros

Junto al balance del programa Conciliamos, la titular de Familia e Igualdad de Oportunidades destacó el “aluvión de solicitudes” que se están registrando para percibir el Bono Concilia, que constituye una de las principales novedades del Plan Familias, promovido por el Gobierno de Mañueco.

Se trata de una ayuda económica para facilitar la conciliación laboral y personal de los progenitores con hijos de 0 a 3 años de 750 euros por cada menor a su cargo. La subvención está dirigida tanto a las familias en las que ambos padres trabajan como a las monoparentales, puesto que son las que requieren más apoyos para conciliar hasta que el menor cumple la edad para iniciar su escolarización en el segundo ciclo de educación infantil.

El objetivo es ayudar a los progenitores a compaginar sus obligaciones profesionales y laborales durante el curso escolar y favorecer la corresponsabilidad en el cuidado de los hijos. Con este recurso, pueden hacer frente a los gastos que les hayan supuesto los servicios de conciliación utilizados, por ejemplo, de guardería o ‘canguro’. Desde el pasado 27 de julio, fecha en la que se abrió el plazo de solicitudes, hasta hoy se han registrado 11.888 peticiones –2.755 en Burgos–.

Niveles de renta

El Bono Concilia tiene en cuenta el nivel de renta de los beneficiarios, así como la pertenencia a los tipos de familias que deben ser especialmente protegidas de acuerdo con el Plan Familias para compensar sus especiales dificultades. Es el caso de las residentes en el medio rural, las numerosas, las monoparentales y las acogedoras. 

Así, con carácter general, para recibir esta prestación es preciso que el nivel anual de rentas de ambos progenitores, en los términos definidos en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), no haya superado los 50.000 euros en 2020, un umbral que se rebaja a 25.000 euros en el caso de las familias monoparentales.

Estos límites de renta se reducen para facilitar la percepción de esta prestación a las familias con necesidades especiales. Así, sobre las cuantías anteriores se aplica una reducción de 3.000 euros por cada hijo con un grado de discapacidad igual o superior al 33 por ciento y de 9.000 euros si ese grado es igual o superior al 65 por ciento.

En el caso de que el progenitor solicitante y el menor o menores que dan derecho a la subvención estén empadronados en un municipio de menos de 20.000 habitantes, el nivel de renta exigido se recorta en el 20 por ciento. Ese mismo porcentaje de minoración se aplica a las familias monoparentales, acogedoras y numerosas de categoría general, mientras que se eleva al 30 por ciento para las de categoría especial. Todos estos descuentos aplicables por discapacidad, residencia en el medio rural, familia acogedora, familia numerosa y familia monoparental son acumulativos.