El año del décimo aniversario de la puesta en marcha del centro municipal de exposiciones y congresos Lienzo Norte ha dejado las dos cifras más altas de la historia de esta instalación en el apartado de ingresos de explotación y de organización de congresos, consolidando de esta manera el funcionamiento de un espacio que mantiene la ratio de una actividad cada día y medio, alcanzando en 2019 la cifra de 228, con lo que desde su inaguración en 2009 son ya 2.230 las que se han llevado a cabo en sus instalaciones.
El año pasado la cifra exacta de ingresos de explotación se elevó hasta los 587.549,87 euros, lo que supone la cantidad más alta en los diez años de existencia, superando los 584.376,29 de 2018, y los 577.181,37 de 2011, los importes más destacados hasta 2019. Los ingresos de alquiler de salas y espectáculos el año pasado supusieron 315.204,96 euros, los de los servicios a empresas externas 161.985,19, los de canon de homologación y suministros 58.759,71, y los de alquileres 51.600. Con ese más de medio millón de ingresos y los 175.000 euros que aporta el Ayuntamiento de Ávila, se ha financiado el centro durante 2019, año en el que también se ha logrado el récord de congresos celebrados en el Lienzo Norte, con un total de 52, superando los 51 que hubo en el año 2011 y los 47 de 2017.
Estos dos mejores datos de la historia del centro demuestra la «evolución a mejor» que ha llevado el Lienzo Norte desde su apertura, según destaca el gerente del centro, Gonzalo Súnico, que resalta que los más de 580.000 euros de ingresos de explotación, siendo importantes, no es lo principal que se busca desde la dirección del palacio, ya que prima el que haya «actividades que supongan un beneficio para la ciudad, antes de que sean beneficiosas económicamente para nosotros».
El conseguir el mejor dato económico está ligado, según explicó Súnico, a que «también se haya logrado el número más alto de congresos, porque son las actividades que más aportan a la facturación». Para el gerente del Lienzo Norte, el haber logrado ese número de congresos, teniendo en cuenta las limitaciones que ofrece la ciudad en el apartado de alojamientos, principalmente, y de otras infraestructuras de comunicación, es un dato «muy a tener en cuenta», y más si se comparan no solo ya los congresos, sino el total de actividades que se celebran en el centro abulense, con las que hoy en otros parecidos de ciudades cercanas.
Con un balance «positivo» en 2019, que demuestra que «tenemos un funcionamiento bastante consolidado», Súnico confía en un 2020 «similar, también positivo. Hemos cogido una velocidad de crucero buena y somos conscientes de que está complicado poder crecer, por lo que nos centramos en cuidar a los prescriptores locales, principalmente, que son los que nos pueden facilitar el que el Lienzo Norte acoja actividades, porque no somos nosotros los que organizamos».