Tarde y baile de merienda

M.M.G.
-

El programa de las Fiestas de Verano repitió un año más, y ya se roza la treintena, el Día del Mayor, en el que se repartieron 600 raciones de chocolate con churros

Tarde y baile de merienda

Resulta complicado imaginar unas fiestas en Ávila sin un día reservado a los mayores. Una tarde en la que ellos son protagonistas y en la que las actividades previstas están diseñadas y pensadas para ellos. 

Estas Fiestas de Verano, y ya son 29, repitieron este martes el Día del Mayor con el clásico baile endulzado con chocolate con churros.

Es verdad que el calor de la tarde (33 grados pudimos ver en los termómetros de los alrededores del recinto ferial, donde tuvo lugar la fiesta) no invitaba a tomar algo caliente. Pero las tradiciones mandan. Y muchos fueron los que se hicieron fuertes pese a las altas temperaturas y acudieron a la cita.

La empresa de Eventos Pilflo fue, un año más, la encargada de organizar el evento. Y su responsable era el que explicaba a Diario de Ávila que había previsto servir hasta 600 raciones de cuatro churros cada una. Es decir, 3.200 churros para alegrar a nuestros mayores.

«Si fueran menos haríamos lo churros de lazos», nos decía Yeray, el churrero directamente ‘importado’ de Miranda de Ebro (Burgos) para la ocasión y que, entre risas, nos decía instantes antes de comenzar el reparto que ya llevaba dos horas sudando.

«Harina, sal y agua», compartía con nosotros una receta de siglos «sin secreto alguno», confesaba también. Tres sencillos ingredientes que combinados en su justa proporción y fritos el tiempo necesario dan como resultado uno de los básicos de los desayunos y meriendas españoles.