La creación de videojuegos españoles ha tenido en 2018 el mejor año en décadas con juegos como The Red Strings Club (Decontructeam), Do not feed the Monkeys (Fictiorama Studios), Red Matter (Vertical Robot) o Solo (Team Gotham), y el año tiene el mejor broche posible con Gris, la opera prima del estudio barcelonés Nomada Studio que consiste en un juego de plataformas en 2D con un apartado visual muy especial y un excelente diseño de niveles que no para de sorprender al jugador. 

Hace más de dos años Adrián Cuevas -quien ha trabajado en Hitman o Far Cry 3- habló con Roger Mendoza, un antiguo compañero de universidad que había hecho en Ubisoft algunos Assassin’s Creed y Rainbow Six: Siege, de la posibilidad de cambiar las superproducciones por un desarrollo indie más personal. Decidieron dar el paso y se rodearon de un equipo de reconocidos profesionales entre los que están el artista publicitario Conrad Roset que ha impreso con sus acuarelas un aire deliciosamente intimista a Gris y el grupo Berlinist que se ha encargado de la envolvente y emocional banda sonora del juego mientras que Óscar Crego ha puesto sus conocimientos de arquitectura al servicio del diseño de niveles.