Será en la noche del miércoles cuando San Bartolomé de Pinares se vuelva a iluminar con la luz de las hogueras, preparadas en las diferentes calles para cumplir con el rito de las Luminarias, una fiesta que mantiene toda su tradición en la localidad sin perder nada de su poder de atracción.

La alcaldesa de la localidad, María Jesús Martín, explica que ya este fin de semana se ha vivido parte de la celebración puesto que el sábado la gente del pueblo fue a recoger los ramos, lo que hace que la localidad «ya esté inundada de ellos» y haya permitido vivir la fiesta como un día de campo.

Ya el miércoles a las 19,00 horas llegará el momento de las vísperas y a las 21,00 horas los jinetes harán un pequeño recorrido antes de volver a reunirse a la puerta del párroco y el Ayuntamiento para proceder a la bendición de los animales. Hay que recordar que la tradición de las Luminarias consiste en un rito de purificación, en torno a la figura de San Antón (que se celebra el 17 de enero) hacia los animales a través del humo de las hogueras por las que después pasan jinetes y caballos en un segundo recorrido que se hace por las hogueras dispersas por el pueblo.

Aunque al ser un día de diario se espera menos público que cuando se celebra en fin de semana, no variará el número de jinetes, que probablemente sobrepasará los 100. En cuanto a los asistentes, si normalmente en el pueblo hay unas 600 personas, la alcaldesa estima que fácilmente se podrá llegar a las 3.000 personas.