El Grupo Empresarial Garbantel sigue creciendo y pone en marcha el Centro de Investigación Tecnológica, un proyecto ubicado en un edificio del Polígono Industrial de Vicolozano de Ávila, junto a su sede, con el que pretenden captar fondos privados y públicos para desarrollar investigaciones relacionadas con la energía y las últimas tecnologías. Con una inversión de 750.000 euros el centro, en el que se lleva trabajando más de un año y que llega de la mano de los laboratorios metrológicos del Grupo, nace con dos objetivos, la investigación tecnológica para multinacionales que demanden este tipo de trabajos desarrollados con personal cualificado y, por otro lado, captar fondos para la investigación de productos y sistemas a través de los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER) de la UE y del Instituto para la Competitividad Empresarial Empresarial (ICE)de la Junta, explica Miguel Ángel del Monte, director general de Garbantel.
En estos primeros compases del proyecto Del Monte confirma que ya hay multinacionales interesadas en la primera pata de la iniciativa y también tienen encima de la mesa ya tres proyectos de la segunda vertiente, los cuales suman un capital aproximado de un millón de euros para los próximos doce meses.
Estos tres proyectos, que se centran en la calidad el aire, las energías renovables y la eficiencia energética, serán el punto de partida un Centro de Investigación Tecnológica que contará con ocho ingenieros de los laboratorios pero que en el próximo año se confía en llegar a un mínimo de veinte, destaca el director general de Garbantel, quien apuesta por sumar profesionales que estén ultimando sus estudios de Económicas, Marketing y Comunicación y de Ingeniería para que puedan optar así a puestos de trabajo en la compañía en los próximos meses. «Ávila está muy bien posicionada para ofertar estos productos, la ciudad está muy bien ubicada y la gente que trata con empresas abulenses repite porque somos comprometidos, honestos y de fiar, pero los proyectos y los fondos no vienen solos, hay que salir a por ellos», apunta gráficamente.
los tres proyectos. Una de las investigaciones está orientada al control de la calidad del aire en centros de trabajo a través del desarrollo de sistemas que detecten virus y otras sustancias nocivas en suspensión para «alertar y proponer otro sistema de filtrado del aire más efectivo para no dejar las instalaciones inoperativas». El segundo proyecto está vinculado a la aerotermia, la tecnología que «dará continuidad a los elementos convencionales como las actuales calderas», mientras que el tercero, que es el de «mayor calado científico», busca desarrollar «una magnitud de caudal» para poder «leer en remoto los contadores» existentes en viviendas e industrias para detectar las posibles irregularidades que impiden una correcta lectura y corregirlas, de manera que no haya que parar una producción para esa verificación. Éste proyecto es «pionero a nivel mundial» y junto al personal de los laboratorios participan «doctores ingenieros de las principales universidades españolas».