Si ha paseado estos días por el centro de Ávila se habrá dado cuenta de que son muchos los turistas que han elegido nuestra capital para disfrutar de sus días de descanso. Muchos, sí, pero no tantos como en otros puentes de mayo. Así al menos lo sienten desde la Federación Abulense de Empresarios de Hostelería, de Confae, representada por su presidente, Víctor Gómez.
Sin ánimo de ser pesimista o de parecer siempre negativo, Gómez reflexiona sobre la afluencia de público en esta primera parte del puente de mayo (que compartimos abulenses con madrileños). Y aunque asegura que no es escasa, sí que siente que podría ser algo mayor.
¿Los motivos para ello? Pueden ser varios, en opinión del experto hostelero. «Quizá influye la cercanía de la Semana Santa», considera Gómez, que se refiere al hecho de que este año entre las vacaciones de Semana Santa y este puente apenas ha pasado poco más de una semana. «Y quizá la gente que no se fuera en Semana Santa ha aprovechado el buen tiempo de este puente para viajar a destinos más lejanos, como la playa», plantea otra posibilidad Gómez que, en cualquier caso, asegura que estos días se está viendo buen ambiente por las calles de Ávila y eso, recalca, «va sumando».
Porque, en su opinión, los hosteleros, más que quedarse con los resultados de un fin de semana concreto, analizan el conjunto del año. Y éste, parece, no está siendo malo. «Es que al final es una carrera de fondo», reflexiona en este sentido Gómez, «y se trata de ir sumando todos los días, en Semana Santa, en el puente, con la llegada del buen tiempo... El año está yendo bien y eso es con lo que hay que quedarse. No hay que ser quejica».
Así que busca Gómez el lado positivo de las cosas y habla de los muchos turistas que están acudiendo a Ávila estos días a pasar una jornada. Es gente que llena bares, terrazas y restaurantes y que consume además en otros establecimientos de la ciudad.
No llenan, eso sí, los hoteles, que este puente no podrán colgar el cartel de completo como en años anteriores. «Es verdad que las reservas de los hoteles no van a ser espectaculares y eso no va a cambiar ya», lamenta Víctor, que en el otro lado de la balanza, en el de los bares y restaurantes, confía mucho en el último «meneo» que esperan tener el próximo domingo, coincidiendo con la celebración del Día de la Madre, cuando la mayoría de las familias deciden salir a comer fuera.