Baja la criminalidad en Ávila en el primer trimestre

B.M
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El balance del Ministerio de Interior indica que se produjeron 1.082 infracciones penales en la provincia, con un descenso de los hurtos. Se registra en este tiempo un homicidio consumado y otro en grado de tentativa, lo que no pasó en 2019

Baja la criminalidad en Ávila en el primer trimestre - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez

El primer trimestre del año dejó en la provincia de Ávila una bajada de la criminalidad que alcanzó el siete por ciento al reducirse las infracciones penales a 1.082 frente a las 1.164 que se habían registrado en el mismo periodo del año anterior. Una reducción que, como siempre, llega con matices, puesto que se contabiliza un aumento en los robos en carácter general, aunque no los que se producen en domicilios.

Según los datos registrados por los diferentes cuerpos policiales, durante el primer trimestre del presente año las infracciones penales en España sumaron 481.872 hechos, lo que constituye un descenso de 8,9 por ciento con respecto al mismo periodo del año 2019, cuya cifra ascendió a 529.066.

Según el informe emitido por el Ministerio del Interior, buena parte de dicho descenso está íntimamente correlacionado con las circunstancias derivadas de la entrada en vigor del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19. Y aunque no se hace una visión provincial, es de suponer que esa misma influencia puede haberse dado en los datos de la provincia de Ávila.

Si se analizan más al detalle estos resultados se observa que al contrario de lo que sucedió en el primer trimestre del pasado año, en este caso sí que hay homicidios. En concreto hay uno consumado y otro en grado de tentativa.

Respecto a los delitos que se han reducido en el primer trimestre del año, se ve que hay menos contra la  libertad e indemnidad sexual, que bajan de nueve a ocho, y también bajas los hurtos, que son precisamente el delito más común que se produce habitualmente en Ávila. En este caso la reducción es de 171 a 159, lo que significa un 11,7 por ciento menos. 

En la bajada general también tiene mucho que ver el apartado de resto de infracciones penales (que no catalogan con exactitud a qué se deben) y que bajan un 10,6 por ciento hasta quedarse en 777.

En subidas se ve que se producen, de forma general, más robos, que pasan de 168 el pasado año a los 176 de este. Sin embargo, es cierto que hay que hacer una serie de consideraciones, entre ellas que los robos con violencia e intimidación suben de 3 a 5 y también ascienden los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, con un 17 por ciento más hasta llegar a los 103. Pero a pesar de ello, el informe desglosa un apartado concreto, el correspondiente solo a robos con fuerza en domicilios, que se reduce un 11,7 por ciento al descender de 77 a 68.

En cuanto al resto de infracciones que aparecen en el informe provincial, se registran 11 delitos (uno más que el año anterior) de lesiones y riña tumultuaria, no hay ningún secuestro pero sí nueve sustracciones de vehículos (+2) y ocho delitos de tráfico de drogas (+1).

El balance que se presenta trimestralmente sirve para recoger la evolución  de la criminalidad en España registrada a través de los datos aportados por los Cuerpos de Seguridad del Estado (Policía Nacional y Guardia Civil), los Cuerpos de Seguridad dependientes de las Comunidades Autónomas (Ertzaintza, Mossos d’Esquadra y Policía Foral de Navarra), y también por aquellos Cuerpos de Policía Local que facilitan datos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Y aunque hay un descenso general en la provincia de Ávila, éste no tiene reflejo en la capital abulense, con un incremento de un 0,9 por ciento en las infracciones penales. De todas formas es una subida mínima porque solo supone pasar de 336 a 339, es decir, tres infracciones más.

En la distribución de los hechos se ve un descenso de los delitos de lesiones y riña tumultuaria, que bajan de seis a cero, y también en los sexuales y de tráfico de drogas. Sin embargo, suben los robos (tanto los de violencia e intimidación como los producidos en domicilios, establecimientos e instalaciones), los hurtos y las sustracciones de vehículos.