La Real Sociedad se llevó la victoria ante el Eibar (1-2) gracias a los goles de Mikel Oyarzabal y Willian José en el partido aplazado de la jornada 24 en la Liga Santander por la mala calidad del aire y disputado este martes sin público por la amenaza de coronavirus, un triunfo que asciende a los donostiarras hasta la cuarta plaza.

El conjunto de Imanol Alguacil sigue en estado de gracia y a su final copera, añade una excelente campaña en Liga. Este martes, la Real Sociedad fue muy fiable, muy sólida y eminentemente práctica para hacer volar los puntos de su estadio maldito. Los 'txuri urdines' llevaban cinco años sin ganar en Ipurua.

Lo hicieron sin público a consecuencia de las medidas tomadas por LaLiga -a instancias del CSD- para prevenir el contagio del COVID-19. Con el ruido del golpeo del balón, las quejas al árbitro y las instrucciones de los entrenadors, el equipo de Donosti golpeó primero con un penalti que provocó Januzaj al lanzar a portería. Su disparo tocó en la mano de Bigas y el árbitro no dudó en señalar la pena máxima. Fue la primera de tres que hubo en el partido.

La Real se mete en Champions a costa de un Eibar deprimido - Foto: Ion Alcoba Beitia

Oyarzabal fue fiel a su cita con el gol desde los 11 metros y no falló ante Dmitrovic, que estuvo cerca de detener el disparo. Los armeros intentaron replicar a la media hora, pero un penalti muy parecido a su favor fue parado por Remiro a lanzamiento de Orellana. Fue un balón de oxígeno para los visitantes y una losa para los locales, que se complican la vida con el descenso.

Para colmo de los pupilos de Mendilibar, a quince minutos para el final llegó el 0-2 en botas de Willian José. El brasileño, que estaba enfadado con su afición, habrá recuperado ese 'feeling' que le ha hecho lograr 9 goles en lo que va de Liga. En esta ocasión aprovechó un pase filtrado de Portu para marcar al meta armero por debajo de sus piernas.

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Y cuando el choque estaba decidido, el colegiado Medié Jiménez señaló un penalti muy protestado por los jugadores de la Real. Zaldúa empujó supuestamente a Kike García y Charles no dejó escapar la ocasión. El 1-2 obligó a recular a los blanquiazules, pero no les impidió sumar una victoria vital en su afán por jugar la 'Champions' la próxima temporada.