Buenas y malas noticias para la Cultural Deportiva Cebrereña en una semana en la que se cruzan los dedos en El Mancho ÁngelSastre. No es el único lugar. Lo hacen en SanAmaro, donde el Bupolsa vive pendiente de lo que pueda ocurrir en Briviesca. Porque el descenso y la pelea por la permanencia vive este martes un nuevo capítulo con la disputa del partido aplazado entre el equipo burgalés y el Cristo Atlético, que recuperan el duelo que la nieve obligó a suspender en el mes de febrero –jornada 23–.   

Miran de reojo la Cebrereña y el Bupolsa ante lo que pueda ocurrir en un partido que puede sacar al Briviesca (24 puntos) de una zona de descenso a la que cayó en la 8 jornada para no volver a salir de ella. Al menos hasta ahora. Una derrota en los últimos 13 partidos –perdió 4-0 con el Astorga– han abierto la puerta a la permanencia de un equipo que, de ganar al Cristo Atlético  –una victoria en los últimos 7 partidos– metería en descenso al Bupolsa (25), llevaría a la Cebrereña (24) a la penúltima posición y colocaría a La Granja (26) a las puertas del descenso.

Puede ser un martes de mucho movimiento en una zona baja donde las buenas noticias llegaban para la Cebrereña en el partido adelantado al jueves y en el que, con todo en contra por culpa de las lesiones, el cuadro de Pepe García se imponía 3-0 al Almazán para seguir pensando que la permanencia es posible. Los dos próximos partidos, ante el Santa Marta y el Burgos Promesas 2000, claves con un final de temporada en el que aguardan el Zamora y el Numancia B.