CaixaBank gana 514 millones sin impactos extras por la fusión

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La entidad supera los 663.000 millones en activos y presta servicio a 21,1 millones de clientes en España y Portugal, tras formalizar en el tercer mes del año el proceso de unión con Bankia

El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar.

El Grupo CaixaBank, presidido por José Ignacio Goirigolzarri y dirigido por Gonzalo Gortázar, obtuvo en el primer trimestre del año un beneficio atribuido sin extraordinarios asociados a la fusión con Bankia de 514 millones de euros, frente a los 90 millones registrados en el mismo período del ejercicio anterior y afectados por las provisiones constituidas para anticiparse a impactos futuros asociados a la COVID-19.

La entidad formalizó a finales de marzo el proceso de unión con Bankia, consolidando su liderazgo en el sistema financiero español, ya que tras la operación supera los 663.000 millones de euros en activos y presta servicio a 21,1 millones de clientes en España y Portugal.

La cuenta de resultados de CaixaBank en el primer trimestre no incluye los resultados generados por la actividad de Bankia en el período, ya que la operación se cerró a final de marzo, por lo que en ese sentido la fusión no tuvo ningún impacto en las distintas líneas de acción. Sin embargo, el balance sí refleja la incorporación de activos y pasivos de Bankia a su valor razonable a fecha de 31 de marzo, tomada como referencia a efectos contables.

Tras la incorporación del patrimonio neto de Bankia, la cuenta del Grupo CaixaBank refleja un apunte extraordinario asociado a la fusión (fondo de comercio negativo) de 4.300 millones, que unido a los gastos extraordinarios de la integración y al resultado ordinario arroja un beneficio atribuido contable en el primer trimestre de 4.786 millones.

El fondo de comercio negativo es fruto de descontar del patrimonio neto de Bankia (13.088 millones de euros) el precio de adquisición pagado por CaixaBank (5.314 millones de euros) y una serie de ajustes contables, al poner a valor razonable diferentes activos y pasivos (3.474 millones de euros).

El resultado sin tener en cuenta el efecto de los extraordinarios de la fusión se sitúa en 514 millones, de los que 444 corresponden a la actividad bancaria y de seguros, 58 proceden de la entidad portuguesa BPI, y 12, de participaciones.

Familias y empresas. El consejero delegado de CaixaBank explicó ayer, durante la presentación de las cuentas del primer trimestre de la entidad, que con la integración de Bankia «consolidamos nuestro liderazgo en el sistema financiero, alcanzamos cuotas de mercado del entorno del 25% y los mejores ratios de solvencia, liquidez y calidad crediticia entre los grandes bancos en España. Ello nos está permitiendo apoyar decididamente a familias y empresas para salir de esta crisis y liderar la recuperación económica».

Gortázar puso también en valor que «terminamos el primer trimestre con un beneficio recurrente de 514 millones, lo que muestra ya un claro avance hacia la normalidad».

Según el consejero delegado del grupo, «somos conscientes de los enormes desafíos estructurales a los que se enfrenta el sector bancario, derivados fundamentalmente del proceso de digitalización de la economía y de los tipos de interés negativos. Por eso hemos querido anticiparnos, acometiendo esta integración que nos va a permitir mejorar sustancialmente nuestra posición competitiva».

 

Ingresos ‘core’ y gastos

Los ingresos core de CaixaBank -sin integrar en el período la actividad de Bankia- alcanzaron los 2.066 millones al cierre del primer trimestre, con un incremento del 1% en tasa interanual. Por su parte, en un entorno de tipos negativos, el margen de intereses se redujo un 0,7%, hasta los 1.191 millones de euros, una caída que se vio compensada por los ingresos por contratos de seguros (+9,3%), los resultados asociados a las participadas aseguradoras (+39,2%), y el crecimiento de las comisiones (+0,2%).

El margen bruto se situó en 2.063 millones, un 4% más, gracias a la mejora de los resultados de las operaciones, que alcanzaron 42 millones de euros, y cuya evolución vino marcada, esencialmente, por el impacto negativo en 2020 de la valoración del riesgo de crédito de los derivados financieros.

Los ingresos de la cartera de participadas crecieron un 34,4% respecto al mismo período del ejercicio anterior, hasta los 77 millones, esencialmente, por la mejora del resultado atribuido de Segur- Caixa Adeslas, impactado por la valoración de activos.

Mientras, los gastos de administración y amortización recurrentes se redujeron un 3,3% en tasa interanual, hasta los 1.149 millones, una caída que se debió a los ahorros asociados a las prejubilaciones de 2020, a la gestión de la base de costes y a menores gastos incurridos en el contexto de la COVID-19. 

La entidad anotó entre enero y marzo gastos extraordinarios asociados a la fusión con Bankia por 40 millones de euros. Sin tener esto en cuenta, el ratio de eficiencia del Grupo se sitúa en el 53,5% y la rentabilidad (ROTE) alcanza el 8%.