La asociación cultural y de patrimonio La Alhóndiga denuncia que la plaza de la Villa de Arévalo «vuelve a ser lugar habitual de aparcamiento de vehículos automóviles» y que «cada vez son más los conductores que utilizan este excepcional recinto como lugar para dejar aparcado su coche».
Desde la asociación indican que la de la Villa es una plaza con unas características únicas en cuanto a su configuración y su historia que la convierten en uno de los elementos del patrimonio cultural arevalense más singulares. «Hay muy pocas plazas en España como esta que, además, está incluida en el Conjunto Histórico (Bien de Interés Cultural) declarado por Decreto 1046/1970, de 21 de marzo», aseguran.
Añaden que durante muchos años la plaza estuvo «en un estado deplorable, algo que propició quejas desde muy diversos sectores incluido el Procurador del Común que, en el año 2004, manifestó su contrariedad por el estado de abandono y ruina en que entonces se encontraba nuestra plaza y así se lo hizo saber a la corporación municipal que regía en aquel momento los designios de nuestra ciudad. Así aparece en el informe anual evacuado por la citada institución».
Desde la asociación La Alhóndiga mantuvieron durante varios años una intensa campaña reclamando que, desde la institución municipal, se prohibiera el aparcamiento en esta plaza. Esta petición estuvo motivada, aseguran, por las continuas «quejas de aquellos que visitaban nuestra ciudad y de muchos vecinos».
Afirman también que otro hecho muy preocupante es que a menudo, en fines de semana y festivos, algunos rincones de esta plaza son utilizados por jóvenes para hacer botellón, lo que «genera suciedad por los desechos que dejan tirados y otros problemas que contribuyen a acrecentar la degradación».
Por estos motivos, la asociación ha registrado ante el Ayuntamiento de Arévalo una solicitud en la que se pide que se tomen todas las medidas que sean precisas para terminar con esta situación y no se propicie que la plaza se esté convirtiéndose nuevamente en un aparcamiento.