"Tener que dejar el fútbol hubiera sido un palo duro"

A.S.G.
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David Terleira reconoce que sus dos meses lejos de los terrenos de juego han sido muy amargos. «Cuando estás en una situación así se te pasa de todo por la cabeza». Verse de nuevo en el campo "era importante para mí"

"Tener que dejar el fútbol hubiera sido un palo duro"

Por un momento pensó que su etapa como futbolista había terminado. «Cuando te ocurre algo así te pasa de todo por la cabeza». Y una retirada por anticipado se le pasó por la suya a David Terleira, delantero de la CulturalDeportiva Cebrereña, cuando un problema de salud le llevó a la grada de ElMancho Ángel Sastre durante casi dos meses. La culpa, una enzimas. «Daban unos valores disparados» recuerda.

Todo empezó, curiosamente, después de uno de sus mejores partidos, el derbi ante el Real Ávila (3-2), un partido que desniveló a favor de los locales con tres goles, a cuál mejor, y del que se llevó el balón del partido firmado por sus compañeros como recuerdo. Sin embargo aquel 11 de noviembre aún le tenía deparado una desagradable sorpresa.  «Se me quedó la cara paralizada».Los valores de la enzima CPK–enzima que se vierte desde los músculos al torrente sanguíneo tras un esfuerzo físico intenso– estaban por encima de los límites. Dos días hospitalizados, varias pruebas médicas y por delante un parón obligatorio. «Tuve que parar por precaución». Empezó entonces su particular ‘calvario’, fuera de los terrenos de juego, sin fecha de regreso y con la Cebrereña en uno de sus momentos más amargos.

«Cuando estás en esta situación todo te pasa por la cabeza.Es cierto que dejar lo que llevas haciendo toda la vida era un palo muy importante para mí. Me ha tocado vivir esta situación tan amarga pero por suerte todo ha vuelto a la normalidad» explica tras dos meses complicados pero que parecen llegar a su fin. «Verme de nuevo vestido de corto era importante para mí, para poder volver a ayudar al equipo y a disputar minutos» señala un jugador que poco a poco va volviendo a los terrenos de juego. Fueron 15 minutos ante el Bupolsa. Ante el Bembibre y el Cristo Atlético ya fueron los 90. «Aún debo hacerme pruebas», pero es buen primer paso. Ahora entiende «a los entrenadores» cómo viven el fútbol desde fuera. «Lo he pasado muy mal» señala un jugador que, además de capitán de la Cebrereña es el jugador franquicia de los suyos. Incluso Pepe García festejaba su regreso al banquillo por el «impacto emocional» que su presencia pudiera tener en los suyos y en los ajenos.

Todavía deben seguir las pruebas médicas, «vamos llevando un control rutinario», pero confía en que todo se vaya normalizando. «Poco a poco» señala el jugador, que ahora debe recuperar el ritmo y la chispa de juego. «Han sido dos meses muy largos, de tensa espera, pero con luz verde ya puedo volver».Y tiene trabajo por delante. «Todas son finales las que nos quedan, y la primera la de este fin de semana y hay que ir a ganar».Por suerte, la Cebrereña ya tiene a su mejor jugador.