Contrariado se mostró este martes el delegado de la Junta de Castilla y León en Ávila, José Francisco Hernández Herrero por las manifestaciones al respecto de la suspensión de la consulta de Pediatría en Lanzahíta porque «no son ciertas». Respondía así a las críticas realizadas por la alcaldesa de Mijares y procuradora en las Cortes Regionales Soraya Blázquez. Y es que aseguró que había tergiversado los hechos al tiempo que la animaba a preguntar directamente a la Administración Regional porque «estaremos encantados de responderla». Explicó el delegado que esa consulta se pasa los martes y los jueves, la última de la semana pasada, la del jueves, se pasó con normalidad, si bien coincidió con el último día de trabajo de la médica que tenía esa responsabilidad. La siguiente ya fue ayer, martes y tras incorporarse una nueva profesional, algo que obedece a un concurso de traslados, pero que en esta ocasión no ha tenido consecuencias ni suspensión de la consulta.

Aún así y dado que hay concurso de traslados en ciernes pedía a los usuarios y a los alcaldes «comprensión» puesto que aunque en el caso denunciado públicamente la política del PSOE no se había producido un «lapso de tiempo entre la salida de uno de los profesionales y la entrada del que tiene que relevarle», cierto es que puede ocurrir, decía Hernández Herrero. En el caso de que se produzca una demora se comprometió a intentar solucionarlo y afirmó que «la vocación» de la Administración Regional es «cubrir todas las plazas». En este punto si dejó entrever que «hay carencia de profesionales» lo que es sin duda un «obstáculo» a pesar de que la Junta quieran solucionar la falta de los mismos. 

Estas puntualizaciones las hacía el delegado en respuesta a la nota de prensa enviada el lunes por la alcaldesa de Mijares y procuradora en Cortes, quien criticó que se había dejado de pasar consulta de Pediatría en aquella localidad y « sin que desde la Junta de Castilla y León se haya aclarado si esta circunstancia es algo temporal o definitivo», aseguró al tiempo que decía que todo ello había generado «malestar y preocupación en los municipios concernidos».