Los policías del futuro celebran el 196 aniversario

P.R.
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El acto, que se llevó a cabo en la Escuela de Ávila, fue presidido por el jefe de la División de Formación, Cirilo Durán, y contó también con la presencia de las autoridades abulenses

Los policías del futuro celebran el 196 aniversario - Foto: David Castro

Un total de 3.400 alumnos de la Escala Básica, de la Ejecutiva, los alumnos de la Policía Local de Castilla y León y una serie de alumnos que cursan el segundo curso de la Ejecutiva y que proceden de diversos países latinoamericanos y africanos, conformaban la formación que ayer se constituyó en el campo de atletismo de la Escuela Nacional de Policía en el acto conmemorativo de los 196 años de la Policía.  En un acto que estuvo presidido por el jefe de la División de Formación y Perfeccionamiento, el comisario principal Cirilo Durán y en el que estuvieron presentes las primeras autoridades abulenses civiles y militares de la provincia: el subdelegado del Gobierno, Arturo Barral; el alcalde de la ciudad, Jesús Manuel Sánchez Cabrera; el delegado territorial, José Francisco Hernández Herrero y el presidente de la Diputación, Carlos García. 

En el transcurso de este acto se impusieron condecoraciones de ingreso a la Orden del Mérito Policial, a la Dedicación al Servicio Policial en sus diversas categorías y la entrega de diplomas.

Recordaba el director de la Escuela, el comisario principal José Luis Tejedor, que en 1824 el rey Fernando VII firmó la Real Cédula que creaba la Policía General del Reino, que es el antecedente de la actual policía. «Con este acto –señalaba el comisario principal– pretendemos transmitir a los alumnos el espíritu de pertenencia al cuerpo e imbuirles del espíritu policial que  deben tener. En el transcurso del acto también fueron homenajeados los policías que se han jubilado este último año y entregamos otro tipo de condecoraciones».

Reconocía el director de la Escuela que este cuerpo policial ha cambiado en todos estos años,  y se ha ido adaptando a las necesidades que la sociedad ha ido demandando en el tiempo. «Está claro que las necesidades de seguridad de 1924 se parecen en poco a la sociedad de hoy en día. El Cuerpo Nacional de Policía, la Policía en general ha tenido un proceso de adaptación a las circunstancias cambiantes y a las necesidades de seguridad que han ido cambiando a lo largo de tiempo. Hablar de ciberseguridad en 1824 no tenía mucho sentido. Hoy en día lo tiene todo. Cualquier cuerpo policial tiene que ser un cuerpo vivo, un cuerpo que se vaya adaptando; si no nos adaptamos, no damos el servicio que requiere la sociedad de nosotros y entonces no servimos. Por ello creo que el Cuerpo Nacional de Policía es un cuerpo vivo y que se va adaptando día a día a lo que requiere el ciudadano.

Cirilo Durán Reguero comentó que la Escuela de Ávila es el referente en cuanto a la formación y en cuanto a la transmisión de nuevos valores a la policía. Defendió también que la presencia del jefe de la División en este acto venía a reafirmar la importancia que da la Dirección General de la Policía a la formación del alumnado que aquí se encuentra. «Estamos cambiando, estamos transformando y donde se produce la transformación real de la formación de la Policía nace de esta escuela. Es donde tenemos que apoyar la transformación policia».

El jefe de la División comento que si bien había cambiado la Policía, adaptándose a las nuevas necesidades que van surgiendo, lo que no han cambiado, dijo Durán Reguero, han sido los valores que sustentan a este cuerpo. “Con el tiempo, y con independencia de los gobiernos, la policía ha mantenido los valores como lealtad, sacrificio,  trabajo y, por supuesto, el servicio público a la sociedad. Es lo que se mantiene en este momento y lo que se transmite a los alumnos de la Escuela de Ávila.

En cuanto a la dificultad para adaptar la formación a fin de hacer frente a los continuos cambios y necesidades que requiere la sociedad, Cirilo Durán dijo que esta se encuentra en «la actualización del profesorado, la actualización de contenidos y, por supuesto la adaptación a las realidades sociales que tenemos. Por eso la Escuela es un organismo dinámico que evoluciona mes a mes, año a año, en función de las necesidades sociales que aparecen cada año».