Ávila vivió una gran tarde de toros

M.M.G.
-

Cartel de 'No hay billetes' y una oreja para cada rejoneador en una histórica cita taurina en el coso abulense

Ávila vivió una gran tarde de toros - Foto: Isabel García

Había ganas de toros en Ávila. Se notaba en el ambientazo que había en los alrededores de la plaza más de una hora antes de comenzar la corrida de rejones que tuvo lugar en el coso abulense.

Una corrida histórica por tratarse de la primera en la que los toros de la ganadería de Adolfo Martín se enfrentaban a los rejones. Pero también, en cierta medida, por ser de los primeros eventos taurinos de una nueva temporada dentro de lo que se ha llamado ‘nueva normalidad’ y que se recordará por los ‘mares de mascarillas’ que estos meses inundarán los tendidos de las plazas de todo el país.

Como ocurría este sábado en el coso abulense.Requisito indispensable para disfrutar de los quiebros de la terna de rejoneadores de primera que conformaban el cartel de la tarde: llevar la mascarilla sanitaria y cumplir con todas las medidas necesarias para prevenir indeseables contagios.

Mascarillas dentro de la plaza y fuera también, en sus inmediaciones, donde antes de que arrancara el espectáculo centenares de personas disfrutaban con la estampa de los caballos que trajeron a Ávila las tres figuras del cartel, encabezado por Diego Ventura, líder del escalafón en esta modalidad del toreo, y completado por RuiFernandes y Leonardo.

Y así, entre fotos a los caballos y refrescos y cañas en los food track instalados a las puertas de la plaza de toros llegó la hora de acceder a las localidades en los tendidos.

Con un aforo del 50 por ciento para poder cumplir con la normativa vigente, los espectadores (algo más de 4.000) fueron ocupando sus espacios dejando uno libre a cada lado. Se trataba, claro está, de mantener la necesaria distancia de seguridad entre los asistentes, que también tenían a su disposición geles hidroalcohólicos en el acceso a los tendidos y a los que se les recordó un par de veces por megafonía antes del comienzo del espectáculo la necesidad de cumplir todas estas normas.

La empresa Tauroemoción estuvo detrás de la organización de un evento que se vio amenazado por la fuerte tormenta de agua y granizo que cayó a primera hora de la tarde y que obligó a que tuviera que secarse con máquinas de aire el albero antes del paseíllo.

Bajo la atenta mirada de un dron aparecieron pasadas las siete de la tarde los tres rejoneadores y sus cuadrillas, que saludaron al respetable (entre los que se encontraba el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera) y a la presidencia y que escucharon en completo silencio el himno de España, a cuyo término, la plaza rompió en una atronadora ovación.

Rui Fernandes fue, a lomos de ‘Mágico’, el encargado de romper el hielo de una tarde en la que cortó una oreja en el primero y se llevó una ovación con saludo en el cuarto, mientras que Diego Ventura recibió ovación con saludo en el segundo y se llevó una oreja y dos vueltas al ruedo en el quinto. Por su parte, Leonardo recibió una ovación con saludos en el tercero, y en el que cerraba plaza sellevó una oreja.