Este lunes dio comienzo en la Audiencia Provincial de Ávila el juicio contra R. R. M, un joven de 22 años acusado de un delito de agresión sexual por unos hechos ocurridos el 1 de mayo de 2016 en La Adrada y para el que la Fiscalía pide siete años de prisión. Hasta doce años eleva la pena la acusación particular de L. M. B, que en el momento de los hechos tenía 16 años y por tanto era menor de edad, por entender que se trata de una violación. Por su parte, la defensa del acusado pide la absolución del procesado que en la primera jornada de juicio se declaró «inocente» al defender que la mantenida con la denunciante fue «una relación consentida», algo que no comparte la víctima que declaró a puerta cerrada y aseguró que si bien sí accedió a irse con él y a los primeros besos, una vez en el coche le dijo al acusado «que parara, que no quería seguir adelante porque además era virgen y no quería perder su virginidad con un desconocido».