El secretario general del PSCyL-PSOE, Luis Tudanca, rechazó hoy de nuevo la oferta de diálogo formulada por el presidente electo de la Junta, el ‘popular’ Alfonso Fernández Mañueco, al considerar que la repitió como un "mantra" durante la sesión de investidura celebrada ayer en las Cortes. “Quieren nuestra sumisión y eso nunca lo van a tener”, afirmó tras considerar que solo lo hace una vez que ha conseguido el poder “sin escrúpulos”.
Tudanca, que intervino ante el Comité Autonómico Extraordinario del PSOE en un hotel de Valladolid, aseguró que PP y Ciudadanos no quieren el “diálogo”. “Ya les conocemos”, añadió para asegurar que muestran una “falta absoluta de ilusión”, porque a su juicio no van a gobernar para la gente, sino que buscan “crispar” y “enfrentar”.
“No vamos a consentir que pongan a esta tierra de rodilla, no vamos a tolerarlo”, avisó, como tampoco que sigan "traicionando" a Castilla y León y que la conviertan en un “mero instrumento” en manos de PP y Cs para hacer oposición al Gobierno de España, a pesar de que se trata de una Comunidad con “suficiente historia y dignidad”.
“Lo único que buscan es nuevas excusas para un nuevo fracaso como el que llevan perpetrando últimas décadas que llevan a la Castilla y León vaciada”, dijo Tudanca, quien también censuró las palabras de Fernández Mañueco al procurador de Vox Jesús García-Conde, en las que, según el socialista, consideró que la “razón de ser” de las autonomías es convertirse en “contrapeso al sanchismo”. Ante esta afirmación, remarcó que Mañueco no quiere gobernar a los castellanos y leoneses, sino utilizarlos como “ariete” de “enfrentamiento” contra el Gobierno “legítimo” de España.
“Una comunidad es mucho más que eso”, exclamó Luis Tudanca, quien le recordó que es gestionar los servicios públicos, poner en marcha políticas para que los jóvenes no se tengan que marchar o “fraguar un mercado de trabajo que de oportunidad y “salvar” a la gente del campo.
“Buscan excusas para un nuevo fracaso y culpables”, advirtió a Ciudadanos para denunciar: “Me culpan a mí de haber pactado, yo no les obligué”, como tampoco a “vender su alma al diablo para conseguir unos pocos sillones”. No están “convencidos” de su pacto, dijo el socialista sobre los políticos de la formación ‘naranja’, que necesitan un “culpable que justifique su vergüenza e indignidad”.