El Museo renueva su guía por sus 50 años en los Deanes

D.C
-

El libro 'Cien piezas' se reedita, corregido y aumentado con la incorporación de una nueva decena de testimonios

El Museo de Ávila, dependiente de la Junta de Castilla y León, cumple este año medio siglo en su sede de la Casa de los Deanes, una efemérides que sus responsables han querido celebrar con, entre otras actividades, la reedición de la guía de piezas «imprescindibles» que se imprimió en 2011 con motivo del centenario de la creación de esa institución, corregida y aumentada para incluir en ella una decena de vestigios del pasado abulense que ha incorporado a sus fondos en esta última década.

Si aquella guía, tal y como decía la entonces consejera de Cultura, María José Salgueiro, celebraba la inauguración el 21 de octubre de 1991 de «la primera insitución museográfica de Ávila, llamada a velar por su patrimonio cultural, protegiéndolo, conservándolo y difundiéndolo», esta que ahora la enriquece con diez nuevas piezas, apunta el ahora consejero del área, Javier Ortega, conmemora que «el 18 de noviembre de 1971 se abrió oficialmente a la visita pública la Casa de los Deanes, sede principal del Museo desde entonces», lo que significaba «el arranque de una etapa de estabilidad tras un largo y oscuro parón de más de treinta años que ha permitido, entre otras cosas, la consolidación de este espacio museístico como uno de los referentes culturales de la ciudad y provincia».

Para enlazar aquel centenario de hace diez años con el medio siglo que se celebra ahora se ha creado esta nueva guía que, como bien explican el director del Museo, Javier Jiménez Gadea, y su exdirectora, María Mariné, «se reedita tal cual, con el único añadido de diez piezas nuevas, una por cada año transcurrido desde 2011, que significan que el museo sigue, con su bagaje a cuestas, mirando hacia el futuro y cumpliendo, año tras año, con su función».

El lector de esta guía, que ahora se edita en papel y próximamente se ofrecerá en formato pdf a través de la web del Museo, «únicamente notará que donde antes decía 100 ahora leerá 110, y que donde hubo alguna errata, ahora –esperemos– estará corregida. En el trasiego, solo una pieza ha sido sustituida, no por demérito, sino por generosidad hacia su recambio».

La guía, añaden el director del Museo y la exdirectora, «se convierte así en una suerte de autohomenaje. Porque las páginas que siguen resultan del repaso de su quehacer como institución centenaria, dedicada a salvaguardar el Patrimonio mueble de Ávila según el mandato fundacional: qué fondos van componiendo la colección, qué directrices inspiran la recolección, qué líneas dirigen la investigación, qué proyectos su exposición. Pero, también, del repaso paralelo de su biografía como entidad, plagada de traslados, letargos, efervescencias, muchas penurias, pocas abundancias, y siempre voluntarismo, que se dirían inherentes a su sino como Museo Provincial».

Las diez nuevas piezas que se unen a la guía y que hacen que su número pase de 100 a 110 son las que se reflejan abajo.