El Ayuntamiento de Burgohondo ha acondicionado varias zonas de baño ubicadas en el municipio, en torno al río Alberche, para poder disponer de más espacios para el esparcimiento de los vecinos y los visitantes de cara al verano. El alcalde de la localidad enclavada en el Valle del Alberche, Francisco Fernández, explicó que, dada la obligación de mantener la distancia de seguridad de dos metros entre las personas o grupos de personas como una de las medidas (junto a las de protección e higiene) para evitar la propagación del coronavirus, desde el Consistorio han apostado por ampliar las zonas de baño disponibles para intentar que no existan problemas de aglomeraciones en el disfrute del buen tiempo. 

Así, junto a Puente Nueva, la Playita o Puente Arco, se han hecho diversas mejoras en las zonas conocidas como Vado del Rey, el Pantanillo y Tabla de los Abades (talabazabares) para que haya «más espacios al aire libre y pueda repartirse» más la gente este verano.

Con todo, desde el Ayuntamiento explican que ya han instalado carteles para avisar de que las autoridades sanitarias no aconsejan bañarse en las zonas de agua dulce por el riesgo de la COVID-19, aunque remarca que «no está prohibido».

Además de las zonas de baño naturales, también está prevista la apertura de la piscina a partir del 1 de julio, adaptada a las circunstancias que en ese momento se estipule por parte del Gobierno. «De momento la restricción de aforo es del 30%, pero en unas semanas no sabemos», apuntó el regidor.